El duro relato de la curva de la vida de Chelo Gª Cortés: de la muerte de su madre a los problemas con su abuela

“Lo primero que me dijeron las monjas es que mi madre había muerto en pecado”, narra Chelo Gª Cortés
El padre de Chelo Gª Cortés fue crucial en la vida de la colaboradora de 'Sálvame': "El peor día de mi vida fue cuando murió mi padre”
La colaboradora de 'Sálvame' se cambió el nombre para no llevar el de su abuela
Chelo Gª Cortés nos ha conmovido dibujando y narrando la 'curva de su vida'. La colaboradora de 'Sálvame', que al principio se rebelaba contra la dirección de 'Sálvame', nos hacía un relato de su vida, cómo afrontó que su madre quisiera dejar de vivir y cómo convivió con una abuela que no la quería. Sin embargo, Chelo se emocionaba hablando de la persona más importante para ella, su padre.
“A los once años dejé de ser niña y dejé de creer”, decía Chelo y es que su madre, que sufría una enfermedad por la que estuvo ingresada en un centro psiquiátrico, decidió dejar de vivir: “Lo primero que me dijeron las monjas es que mi madre había muerto en pecado”.
Pero además, en aquella época a las personas que morían así no se les permitía ser enterrados en un cementerio, con lo que su padre lo vendió todo para pagar lo necesario para conseguir que fuera enterrada en La Almudena. Entonces no le diagnosticaron, hoy por hoy, Chelo cree que su madre sufría bipolaridad.
Chelo Gª Cortés se cambió el nombre para no llevar el de su abuela
A partir de entonces, vivió también con su abuela paterna y con ella descubrió que no todas las abuelas son buenas: “No me quiso, no nos trataba bien y mi padre pagaba religiosamente”. Por eso, Chelo no lo dudó y se cambió el nombre: “Mi abuela se llamaba Consuelo y yo no quería tener nada que ver con esta señora”.
Un año después, su padre conoció a alguien, una mujer “maravillosa” con la que empezó una nueva vida. Para Chelo, la figura de su padre es primordial dado que hizo de padre y madre acompañándola y entendiéndola en todo: “Por eso, el peor día de mi vida fue cuando murió mi padre”.
El amor de Chelo Gª Cortés y José Manuel Parada
Chelo creció y empezó a hacer su vida en Orense. Allí trabajó en la radio y conoció a José Manuel Parada, su primer gran amor. Él le hizo darse cuenta que tenía que hacer más cosas, estudiar, y se matriculó en la universidad.
Sofía Cristo: “Se comió la flor de mamá”
Años después conocieron “a la mejor vedette del país”, Bárbara Rey, se hicieron muy amigos y con ella descubrió algo en una fecha que tiene marcada: “El 31 del 12 de 1979, descubro que puedo estar con una mujer o un hombre”. Sofía Cristo, presente en plató en aquel momento, no dudaba en susurrar: “Se comió la flor de mamá”.
El gran amor de su vida, Marta Roca
Después, Chelo García Cortés tuvo otros romances, algunos más serios que otros. Hasta que conoció a alguien que le fue infiel y que, de este modo, le llevó al gran amor de su vida, Marta. Y es que la pareja de Chelo le estaba siendo infiel con la propia Marta. Cuando se dio cuenta, Chelo la conoció y acabó enamorándose: “Montamos un jardín que dura desde el 89 hasta hoy”.


