‘Sálvame’ ha podido hablar con una de las personas encargadas de elaborar el informe psicosocial de Rocío FloresRocío Flores tras la agresión narrada por su madre. Este tipo de informes lo elaboran un conjunto de personas encargadas de analizar el entorno familiar, educativo y social y quiere destacar tres conclusiones: la "coordinación" entre el testimonio de la hija y Antonio David Flores, el "desgarro" de Rocío Carrasco y la "frialdad" de su hija.
“La persona que hizo esas entrevistas nos dice que hay una absoluta coordinación entre el testimonio de Rocío Flores y de Antonio David, dice que es una mala madre, que no cuidaba a sus hijos, que no se encargaba de su medicación, que había dado golpes a su barriga estando embarazada y exactamente lo mismo decía Antonio David”, nos transmitía Victoria Laseca.
Ante situaciones como esta, suele proponerse una solución por parte del equipo, en este caso se recomendó un internamiento en un centro para hacer terapia con la familia pero se vio “inviable” ya que la hija “no quería hacer terapia con su madre”.
Destacan además la “absoluta negativa” del padre, que no quería “admitir” que su hija hubiera cometido ningún delito. Así que se optó por una mediación familiar para facilitar el diálogo entre madre e hija, se intentó tres veces, pero tampoco fue posible: “Tanto el padre como Rocío Flores se negaban”.
Esta persona ha tratado cientos de casos similares per destaca que aquí ve que la hija tiene “una realidad distorsionada”, el “desgarro” del testimonio de Rocío Carrasco y la “frialdad” de Rocío Flores.
Ha salido de casa de su padre ante una fuerte expectación mediática pero no nos ha dejado ver casi ni sus gestos bajo la gorra. Rocío solo ha dicho que no tiene "absolutamente" nada que decir, pero sí le parecía "curioso" que hay quien le diga que solo habla cuando le pagan.