Antes de escribir el nombre de la persona de su grupo con la que se iría a una isla desierta, María Jesús Ruiz entró al trapo de todas las bromas que le hacía Jorge Javier en la conexión. Al presentador le llamó la atención la “posturita de modelo” con la que la superviviente esperaba su turno y le pidió que realizase alguna postura más que realizó sin dudarlo y para risas de todos.