La gala de la semifinal de Gh15 salió redonda, dejando fuera del juego a cuatro concursantes de lo más prescindibles, a excepción de Rubia, quien fue con diferencia la más sincera y protagonista de todos ellos.
El primero en desfilar rumbo a los estudios de Fuencarral fue Jonathan, tal y como era de esperar. El integrante de la borregada, que sólo contó con un 5,3% del apoyo de la audiencia votante, demostró que tiene la capacidad de explicarse como un libro cerrado y de balbucear como un niño de pocos meses.
Lo único que supo dejar claro fue que quiere a Yoli y que entre ellos existe una fuerte atracción. Mucho más de lo que creí que reconocería, pero insuficiente, como su despedida de la casa.
Las primas no entendieron que Jonathan no se mojara anoche y que no brindara su apoyo a Yoli. Pero tratándose de este concursante, poco logra sorprendernos a estas alturas.
Hugo fue el segundo menos querido por la audiencia, acumulando un 6,8% de los votos. Realmente aprecié que llegados a este punto este chico no tuviera ningún reparo en admitir que no había hecho nada en la casa. Su participación en el concurso dio por finalizada muchas semanas atrás, habiendo sólo destacado durante los últimos días por haberse convertido en el nuevo compañero de cama de la hawaiana y por los monólogos infumables que protagonizaba noche tras noche en sus paseos por el jardín.
Sin duda alguna, el punto culminante de la noche tuvo lugar cuando conocimos que Azahara se convertía en la tercera expulsada de la noche, y ya no sólo porque se lograra que la malagueña pasara a hacer de ficus bajo el techo de su casa, sino porque eso significó que las primas lograban pasar a la final de Gh15.
Tras unos breves momentos en los que Azahara nos recordó que sufre de fobia social, pasamos a contemplar cómo la malagueña se tapaba la cara para no ver parte de los videos de su paso por el concurso.
El espectáculo no termina hasta que se baja el telón y aún nos quedaba presenciar unos cuantos pases de los dramas de esta chica. Azahara intentaba quitar hierro al asunto y aseguraba que las imágenes junto a Juanma sólo mostraban el entendimiento que había entre ambos, que sólo había existido una amistad, que está muy enamorada de su novio…
Verborrea a la que se sumó Juanma, quien aseguraba que él nunca ha dejado de estar con su novia de 4 años, que siempre la respetó dentro de la casa y que están muy bien.
¡O estos chicos se creen muy listos o se piensan que el resto de la humanidad somos imbéciles! Los telespectadores sabemos bien lo que hemos visto y oído, sin cortes, sin ediciones, directamente desde el directo de la casa y me resulta realmente indignante que a estas alturas tengamos que seguir aguantando a individuos que toman a la audiencia por seres unineuronales porque ellos mismos sean incapaces de admitir sus errores o sus estrategias.
Mientras tanto, al circo se sumaba el tercero en discordia desde las redes sociales. El novio de Azahara recuperaba su movilidad en los dedos para escribir algo más que promociones de sus proyectos profesionales y anoche cargaba duramente contra Mercedes Milá y contra el programa:
“Q buena gente Mercedes Mila ..No me callo ni una más ..Q pasa q Paula al ser concursante no se le puede hacer daño.. Claro ella da audiencia
A alguien q no entra en vuestro juego se le puede hacer daño hasta q se muera ... A alguien de dentro de la casa y q da audiencia no... GH
Pero entonces no me he enterado bien ..... Al final opto a ganar los 300.000€ ??? Tengo dudas”
Vamos, que para soltar estos brillantes mensajes bien podría haber seguido en silencio. ¿”Hacer daño hasta que se muera”? ¿Pero este chico habla en serio? Lo único que me ha quedado claro con esto es que a pesar de las continuas quejas de Azahara sobre la incompatibilidad existente en su relación, finalmente hemos podido comprobar cuál es el nexo en común en esta pareja: su tremenda facilidad para crear dramas donde no los hay.
Dejando de lado a los concursantes que se han quedado a las puertas de la gran final le llega el turno a las tres féminas que han logrado convertirse en las flamantes y alegres finalistas de Gran Hermano 15.
Flamantes y felices por lo menos en el caso de las primas, porque la hawaiana ha tardado nada y menos en poner en marcha su papel de pobre victimita de la vida, alejándose del resto de su compañeras y haciendo oídos sordos a los intentos de acercamiento de Yoli y Alejandra.
Y es que pase lo que pase Paula siempre parece la víctima de todas las historias. Que la hawaiana realiza declaraciones de lo más polémicas sobre el trato que ha dado a su familia, es que nosotros hemos malinterpretado sus palabras porque esa es sólo su forma de hablar.
Que la hawaiana admite haber tirado a su hermana por las escaleras por un ataque de celos, es que nosotros estamos dando importancia a un hecho que sucedió fuera de la casa…
¿Y cuándo se ha hablado largo y tendido de la situación familiar de Shaima y sus problemas al no haber seguido al pie de la letra lo esperado según su religión? ¿Y cuándo se ha juzgado a Paco por sus relatos sobre sus métodos de seducción con las mujeres de su pasado? ¿Y cuando hemos comentado que Paula y su madre estuvieron 5 años sin hablarse? ¿Y cuando hemos examinado al milímetro la relación de Lucía y Omar de antes de entrar en el concurso? ¿Y cuando hemos hablado de la nula relación familiar del padre de Alfredo con Omar? ¿Y cuando hemos hablado de los graves problemas económicos que han sufrido Loli y Mayca?
Todos estos puntos han sido fuertes temas de conversación en la casa, en los platós, en las galas y en los debates. Hemos tenido acceso a esa información sobre la vida y comportamiento de la vida de estos concursantes antes de su entrada al reality porque ellos mismos han decidido contarlo dentro de la casa. Ahora que alguien me explique la diferencia que existe entre comentar cualquiera de esos relatos a comentar que Paula se metió en un tío por robar a la amiga de su hermano o por tirar a su hermana escaleras abajo cuando la niña tenía 8 años…
Pero los paulistas pueden estar tranquilos, ya que la propia familia de la protagonista no tiene ningún problema con el tipo de información delicada que está filtrando Paula, ya que la madre de la susodicha ha sentenciado: “Lo importante es que hablen de uno aunque sea mal”.
Pues sí, en eso no hay discusión posible. En ese terreno Paula ha ganado al resto de concursantes por goleada.
Decir que me siento satisfecho porque Yoli y Alejandra hayan podido mantenerse dentro del concurso hasta el día final es obvio si habéis seguido mis entradas del blog.
La decisión por parte de su familia ha sido más que criticada, sobre todo tomando como excusa unas declaraciones de Alejandra, quien ajena a que la decisión de los finalistas de la edición se decidiría mediante la acumulación de votos durante varias semanas, admitió que ella quería que Yoli y ella estuvieran en la final y que no quería que votaran sólo a una.
Pues bien, de igual manera tomad nota ya que hace tan sólo unas horas Alejandra lanzaba el siguiente mensaje pidiendo la unificación de los votos: “No me importa que vayan los votos a una de las dos. Que se centren en una. Da igual a cuál de nosotras”.
Cada cual que vote como ganadora de Gran Hermano 15 a quien le venga en gana, pero aquellos que queráis asegurar que el maletín se vaya para Albacete, y aquellos que queráis impedir que el ‘Paupelón’ se haga con la victoria frente a la frescura y sinceridad de las primas, debéis tenerlo claro, la división de votos únicamente allanara el camino para que la hawaiana se haga con el premio de los 300.000 euros, por lo que realizar una llamada o enviar un sms para hacer a Alejandra ganadora es la única estrategia viable para que las primas puedan disfrutar como se merecen de su victoria el jueves que viene.
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