Alonso reclama un trato especial en el reparto de derechos de interpretación de la canción

telecinco.es 25/01/2017 09:48

Asombrado por las dotes para el baile de Alejandro Abad puedo constatar que anoche se dio carpetazo a la carpeta sobrevenida de este GH VIP. Una de sus protagonistas lo dijo claramente: “No es normal que el primer día me diga que le gusto”. Son palabras de Elettra Lamborghini, cuyo último capricho ha sido decirle al representante de Daniela en la casa, el omnipresente Aless Gibaja, que no pasará nada entre ellas dos. Daniela se ha dado demasiada prisa. No estoy mintiendo cuando digo que me es indiferente si pasa algo o no, ahora bien, he reconocer que me alegro de escuchar esto en boca de Elettra. Complace saber que no solo uno ha pensado en la excesiva premura por cumplir con los deseos de una parte de la audiencia, que desde antes de comenzar el encierro ya pedían esta carpeta.

Elettra le dijo más cosas a Aless, lo cual viene a ser lo mismo que decírselo directamente a Daniela, y ella lo sabe. Le dijo, por ejemplo, que Daniela no es su tipo. “Está guapa, sí, pero no me gustan algunas cosas que hace”, afirmó la italiana. Aless había conseguido su objetivo, y sospecho que también Elettra. No podía haber encontrado manera más sencilla para deshacerse de Daniela. Así evita el momento violento y desagradable de hablar directamente con ella, con la seguridad de que le llegará todo lo dicho. Otra cosa es que Daniela se dé por enterada o decida seguir el juego a su manera y con sus reglas. También puede pasar que Elettra diga digo donde dijo Diego. Ya sabemos lo que suele pasar con estas cosas.

Elettra duda de que le guste a Daniela. Piensa que si así fuera ella lo notaría. “A mí me gustaría que estuvierais juntas”, decía Aless ‘Celestino’. Hay una desconfianza clara de Elettra, como se puede ver con claridad en esta afirmación: “Nunca he visto que lo estuviera intentando de verdad conmigo”. No se cree a Daniela, está bien claro. Por eso terminó concluyendo que no serán más que amigas. Según dijo Elettra ya lo han hablado y así va a ser. Lo que más compromete a Elettra es su afirmación clara y tajante: “No es mi tipo”. Digamos que uno no dice algo así si contempla la posibilidad de terminar liado con esa persona. Todos recordaríamos esto, y a nadie le gusta dar a entender que está con alguien que no es su tipo.

La desconfianza de Elettra se torna en envidia cada vez que habla de Aly. Su inquina hacia esta compañera es irracional. Está tan claro como que su confianza con Aless es una torpeza descomunal. Utilizarlo como correo para que su mensaje llegue a Daniela es igual de cómodo que de arriesgado. No tendría yo total confianza en que Aless fuera a trasladar mi mensaje correctamente. Y, sobre todo, no confiaría en que sus intenciones fueran buenas. ¿Por qué hace Aless lo que hace? ¿Qué le motiva? Aparentemente intenta separar a Marco de Aly al tiempo que pretende tender puentes de Daniela a Elettra. Pero dudo de que sea realmente lo que intenta. La doblez de Aless contrasta con la candidez de algunas de sus víctimas, si no todas.

Cándido me parece Marco cuando confía en Aless. Anoche el italiano y Aly mantuvieron una larga conversación bastante árida e intrincada, pero de la que logré sacar en claro que Aly no tiene doblez. Es tal cual la vemos, algo que tranquiliza saber. Podemos ponerle pegas a Aly porque es demasiado básica, refractaria a los problemas, poco comprometida y fría como un témpano. Este gato exigente tiene su concurso en cuarentena porque dice una cosa y hace otra a la hora de nominar. Si al menos respondiera a las expectativas repartiendo sus nominaciones la tendría en un altar. Lástima que no sea así y parezca inconscientemente teledirigida por Daniela Blume, su excompañera de trabajo, aquella con la que compartió años en un estudio de radio (pero nunca vio fuera de allí), la que siempre tuvo con ella actitud de jefa (sin serlo).

Al menos Aly sabe interpretar bien a sus compañeros. Sucede que luego relativiza y se lo pasa por el arco del triunfo. Parece como si dejara todo en la cinta de correr. Ocho kilómetros diarios curativos tras los que le es indiferente si Aless ha intentado perjudicarla innecesaria e inexplicablemente. Anoche se enteró de que había ido a advertir a Marco del peligro que encierran sus jueguecitos con ella. Tuvo bien claro la mala intención de Aless, pero Marco ofrecía una vez más su rostro más cándido, el de ese chico inocente que cree en la buena voluntad de los demás. Me inquieta el figurín (así le llama Alonso) porque no termino de pillarle. ¿Es realmente tan inocente o se está vendiendo así?

Aly se sintió liberada cuando dijo: “Está tremendo este hombre. Estoy enamorada de él”. La mente le hizo un clic en ese momento, aunque anoche confesaba que no está enamorada realmente. Y lo hacía minutos más tarde de que Marco dijese que Aly le parece una mujer interesante. De acuerdo, no es una declaración, pero se le parece. Pero claro, Marco es adulador por naturaleza (Alonso diría que lo lleva en los genes). Aly cree que no debe preocuparse nadie porque Marco tiene novia y porque están en un programa que ven millones de personas. Ya sé que no hace falta interpretar lo dicho porque el lector es inteligente, pero me pagan por ello. Aly viene a decir que si Marco no tuviera novia intentaría algo con él. Lo mismo si no estuvieran delante de las cámaras. Mi sospecha es que no son razones acumulativas. Es decir, bastaría con que no existiera una de ellas para que las cosas fueran diferentes.

Todo lo anterior ocurrió durante la fiesta de anoche. Fiesta venezolana no prevista porque los martes era otro el plan. Además, una fiesta curiosa en la que algunos no se despojaron de su ropa de sirvientes. Es el caso de Aly, que hizo permanentes incursiones al corral de las cabras y las gallinas. Ese fue otro motivo de fricción entre esta concursante y Elettra. No hay ninguna duda de que no se pueden ni ver. Raro no ver a una criticando a la otra y viceversa. Cualquier motivo parece bueno, en este caso el cuidado de los animales. Aly visitando y jaleando a las cabras y Elettra pidiendo que se las deje descansar.

Lo cierto es que Aly tiene sobrada experiencia en el cuidado de este tipo de animales. Pasó los primeros años de su vida rodeada de ellos. Sabe tratarlos, lo que necesitan en cada momento. Si las cabras están mejor tranquilas o conviene animarlas a cada poco para que estén bien. Solo ver cómo intentaba Elettra ordeñarlas le bastó a Aly para saber que no tiene ni idea. Está claro que me estoy posicionando, ¿no? Pero es que no me parece que haya duda en esto. Elettra debería echarse a un lado, y si quiere aprender que haga caso a Aly. En lugar de hacer esto prefiere criticarla y quedar como la gran defensora de los animales. Pues mira, no. No cuela.

Mucho antes de comenzar la fiesta se habían metido todos en el papel de clientes o servicio, lo cual les otorga identidades nuevas. Tutto es MacGregor, miembro de una familia de irlandeses en la que todos son pelirrojos. Menos él. Esto debería ser noticia, porque después de más de dos semanas de encierro Tutto hizo ayer su primer chiste. Enhorabuena a los premiados. Y antes de meterse en el papel de la prueba semanal el ‘súper’ les llamó a todos al ‘confe’ para contarles que la canción ‘Mi Gran Hermano, mi amigo’ se va a comercializar. Buena noticia que no todos recibieron igual. Diría que hubo tan solo dos voces discrepantes, aunque solamente escuchamos una. Tanto Alonso como Elettra pusieron inconvenientes y pidieron que examinase el tema su equipo de representantes, abogados o lo que fuera.

La actitud de Alonso me pareció tan negativa que me hizo cambiar completamente de opinión sobre lo que debería pasar este jueves. Pensaba que haría bien al espectáculo la permanencia de Alonso en la casa, y por eso prefería que el expulsado estuviera entre Emma o Tutto. Ahora creo que nada justifica que Alonso permanezca un minuto más en esa casa. Ayer vi a todo el grupo ilusionado con la posible comercialización de la canción, salvo un Alonso preocupado por sus derechos de imagen en el videoclip porque no todos tienen el mismo caché. Están en su derecho de defender sus intereses. Es incluso su obligación. Pero querer destacar en esto me parece despreciable. El trabajo de todos en la canción vale igual, independientemente del caché que pueda tener cada uno.

La actitud de Alonso me hace mirar con cariño y simpatía a Irma. No estoy bromeando. También logra este concursante que le dé la razón a Aless cuando ayer decía: “Alonso no está de acuerdo. ¡Qué raro! Es una novedad”. Totalmente de acuerdo con la ironía de Gibaja. Alonso no está de acuerdo nunca con nada, y cuando lo expresa se ve que hurgando un poco no hay nada. Bajo su protesta permanente hay un vacío mareante. Ni siquiera cuando aparece alguien y le da una bofetada de realidad logra espabilar. Ayer lo hizo Alejandro Abad. “Si no quieren participar no hay problema, se eliminan sus voces en la canción, se quita su imagen del videoclip y tirando”, decía Alejandro. Tan sencillo como eso.

El reparto de derechos está bien claro. Los de autores son para Alejandro Abad y Tutto Durán, y todavía es generoso Abad porque en realidad la mayor parte del trabajo fue suyo. Los derechos de interpretación deben ser repartidos a partes iguales entre todos los participantes. Trece personas en concreto, incluyendo a Toño Sanchís, lo cual se ocupó Alejandro de repetir en varias ocasiones para que quedara todo bien clarito. ¿Qué diablos dice Alonso de diferentes cachés? Demasiado oportunista y un inconveniente para que ese tema vaya para adelante. Por eso me parece que lo dicho por Alejandro va a misa. Si Alonso o Elettra tienen inconveniente en participar de la forma propuesta basta con eliminar sus voces y dejarles aparte, ajenos a ese proyecto. No hay más.

Moleskine del gato

La prueba semanal de la casa rural ‘Vip Sierra’ ha terminado con las jornadas de doce horas. Algunos de los que antes se acostaban a medianoche, o antes, y no despertaban hasta las once de la mañana ahora han tenido que cambiar sus costumbres. Esta mañana el servicio levantó bien temprano, lo cual me hace desear que esta prueba no dure una semana sino un par, por lo menos. Sería razonable, especialmente si realmente entran huéspedes el jueves. Lo mejor de la prueba es que se ha roto la división de dormitorios por género. Solo por eso le hago la ola a la casa rural ‘Vip Sierra’.

El grupo es tan ‘flower power’ que se han tomado el papel de sirvientes con disciplina y apenas sin rechistar. Hasta Elettra, a la que imaginaba contrariada, parecía ayer encantada con su humilde labor. Está claro que hace falta algo de veneno, un moscardón que agite el avispero. Me relamo.