Fue el periodista Ferran Monegal quien hizo popular el término “ratoncitos” referido a los concursantes de Gran Hermano. También ha sido bastante común en estos quince años largos escuchar el símil de los peces en una pecera, observados por el espectador desde el otro lado. Incluso se ha manejado semejante equivalencia con monos enjaulados. Supongo que ninguna de estas ocurrencias deja en buen lugar a los sufridos concursantes, aunque siempre lo aceptamos como recurso argumentativo. Otra cosa es que sea un concursante quien utilice el símil animal, y lo haga con intención de ofender. La ofensa multiplica su eficacia si se hace al grueso del grupo, como fue el caso de una Maite en brote, que esta madrugada causaba la primera crisis apenas un día después del comienzo de esta edición.
Para Maite todos son ovejas en un rebaño, excepción hecha de Aritz, el bohemio desactualizado que canta, pero no canta. El brote de la conductora de autobús navarra, ocupación que ayer fue puesta en duda por varios concursantes, fue tan extemporáneo como divertido. Estaban Marina y Han (si no me falla la memoria) hablando en uno de los dormitorios, cuando la supuesta madre le preguntó a Maite si la molestaban. Maite ya estaba en su cama, y desde allí les contestó que sí. Con gran consideración, se marcharon del dormitorio para seguir hablando en algún otro lugar de la casa. El resto de los concursantes, sin excepción, seguían despiertos y en activo. Solamente Carlos se había acostado ya, aunque su intento fue baldío y estaba de cháchara con varios de sus compañeros. Entonces se despertó la bestia y escuchamos a Maite protestando a voz en grito porque no podía dormir.
Durante mucho rato nos preguntamos por qué las cámaras no enfocaban a Maite y nos estaban privando de parte de ese espectáculo. Un poco más tarde supimos la razón. La concursante iba casi en paños menores. Con una prenda intentaba cubrir la mitad inferior de su cuerpo, pero no le daba, por lo que su culo quedaba casi totalmente al descubierto. De todas formas, pudimos escuchar sus amargas quejas. Cuando Maite se marchó a dormir intentó sin éxito que la acompañasen los demás. Ya lo había intentado la primera noche, con tan poca fortuna como anoche. Es de agradecer que a estas alturas de la película los concursantes no admitan estar sometidos a la dictadura de nadie que pretenda hacerles imponer un horario.
Maite salió del dormitorio echa una furia, protestando a sus compañeros porque no podía dormir al permanecer todavía la luz encendida. En el reglamento que ayer estuvieron repasando, como en cada edición, se les advierte que no deben pedir que les apaguen la luz por las noches, porque esto no sucederá mientras no estén callados intentando conciliar el sueño. Si no es así, deben pedir a quien siga hablando que salga de la habitación. Otra cosa es que no apaguen la luz si hay solamente una persona durmiendo, en cuyo caso lo que debe hacer es resignarse, o considerar pedir en el ‘confe’ un antifaz. Ninguna de estas cosas hizo Maite, sino que optó por montar la primera bronca de esta edición. Aunque ya puestos, aprovechó la circunstancia para intentar quitar a sus compañeros la idea de que Suso pueda no ser su hijo, consciente de que ese comentario se había estado haciendo de forma bastante insistente en la casa durante el primer día de encierro.
Como ella misma confirmó después, había visto la reacción de pasmo generalizado ante su extemporánea protesta y pensó que podía sacar provecho de la situación. Fue entonces cuando reclamó apoyo a Suso, como hijo suyo que es (en la ficción forzada por el programa). Al no obtener dicho apoyo, Maite atacaba a Suso llamándole “traidor” y acusándole de estar del lado de su padre. “Por eso quería yo venir contigo a Gran Hermano, ahora ya sé de qué lado estás”. Suso se subió a ese prometedor carro como quien es incapaz de dejar de saborear una inesperada golosina. “No quiero decirle nada, porque es mi madre. ¿Qué puedo yo hacer ante esto? Es injustificable, no lo puedo justificar”, decía Suso, metido en su papel.
El grupo se solidarizó con Suso e inmediatamente se pusieron de su lado. La maniobra de Maite, unida a la tal vez excesiva dramatización de Suso, hace a este concursante inviolable en la primera nominación, toda vez que no se demuestre que su relación con Maite es falsa. Todo esto pasó sobre las tres de la madrugada, y un rato antes Raquel compartía con Carlos su convencimiento sobre que Suso y Maite no son nada, es decir, que no tienen ninguna relación y se conocieron la noche anterior. Como digo, no solo esta concursante lo piensa. Maite entró el domingo en la casa diciendo “este es mi hijo” antes de decir su propio nombre, lo cual es bastante sospechoso. Además, Maite ha incurrido en alguna contradicción, cosa más posible en personas con su excesiva verborrea. La primera noche contó que Suso vivía con su padre e iba a verla de vez en cuando, pero esa misma mañana le dio otra versión a Niedziela. O vive con su hijo o no. No es algo tan difícil. Diría que en este caso la versión fija debería ser que no, porque él ya entró diciendo que vivía en Barcelona y ella en La Ribera, provincia de Navarra.
Mientras Maite seguía en brote y Aritz intentaba hacer de mediador, me pareció que aprovechaba la situación para intentar conjurar esos comentarios que estaban poniendo en solfa su pretendida maternidad. Al terminar la representación, Maite y Suso hablaban brevemente sentados en la cama de aquella, y mis sospechas quedaban confirmadas. “Hubieras estado mejor si llegas a llorar”, decía Maite. “Yo he estado fenomenal. Ahora no te van a hacer preguntas ni nada”, añadía. Cuando Suso le advirtió de que ponerse en contra de todos puede implicar una segura nominación, Maite decía estar tranquila. “Que me nominen, ¿quién va a expulsarme? No hay en España una tía como yo”, decía. Y mientras se sacudía las axilas, Maite ponía el colofón a su surrealista intervención afirmando: “Me la suda, me la suda, colega”.
Con la excepción de Aritz, el mediador, y Sofía, la auténtica hija, el resto de concursantes expresaron su desagrado por haber sido comparados con un rebaño de ovejas. Pasaron de las imposiciones de una Maite que había salido del ‘confe’ diciendo “aquí mando yo y se hace lo que yo diga”, y diría que hasta la respuesta del conjunto fue bastante discreta, evitando la confrontación directa. Curioso me parece que Aritz saliese indemne, a pesar de la dificultad de mediar entre una persona y un grupo unido en bloque en su contra. Con más miramientos observaron que Sofía fuera la única (aparte de Suso) en ir a hablar con Maite después de su numerito. Sofía lo justificó diciendo que no le gusta ver a nadie mal, a lo que le contestaron que los demás también estaban mal. Sin ir más lejos, Amanda estuvo llorando un buen rato, mientras Maite seguía despotricando.
La escena había terminado con Maite retirándose a dormir tras haber conseguido justo lo contrario que pretendía en un principio, puesto que el grupo en bloque se quedó reunido en torno a la extraña mesa de comedor. Antes de volver a su dormitorio, Maite les espetaba a todos: “Vuestro castigo tendréis, no os preocupéis”, añadiendo un exabrupto más. Me parece que fue Vera quien le respondió con un “venga, hasta nunqui”, que me suena ligeramente.
Si algunos concursantes tenían algo en contra de Maite, esta movida lo ha podido fijar a fuego. Amanda le contaba a Marina que Maite le había dedicado la noche anterior palabras tan poco delicadas como estas: “Tienes la boca grande para comer…” Creo que no es necesario completar la frase. Amanda ya tenía una nominación decidida, pero lo de anoche terminó de convencerla.
De la maniobra de Maite, no me cabe duda que ella sale nominada con total seguridad. También veo meridianamente claro que Suso ha salido reforzado, prácticamente inmunizado de cara a las primeras nominaciones, que presumiblemente serán este mismo jueves. Otra cosa es en la situación que quede tras conocerse los secretos, y concretamente el suyo. Tal vez en ese momento lamente la excesiva e innecesaria dramatización de anoche. La tentación de aprovechar la coyuntura para convertirse en víctima tiene en este caso el riesgo de sufrir un posterior rechazo, cuando los demás sepan que no es hijo de Maite. Por parte de Suso la maniobra es arriesgada.
Por otro lado, a Maite le perjudica doblemente todo esto, porque hasta ahora el grupo no había insistido apenas en la sospecha de que Sofía pueda ser su hija, lo cual surgió anoche con fuerza tras haber visto el inteligente papel de esta durante toda la bronca. Sofía no perdió ripio de lo que todos decían sobre su madre, incluyendo Suso, supongo que para poder transmitírselo después.
Detrás de la maniobra de Maite, aparte de su intento de cortina de humo que forzase la convicción del grupo sobre la relación de madre e hijo, hay una gran verdad, y es que no soporta a casi nadie. “Son putas ovejas de corral”, le decía a Suso en la conversación posterior. Eso sí lo piensa y de ahí los trajes que ha confeccionado a varios compañeros, más bien compañeras, en fugaces encuentros con Sofía, quien comparte con su madre esa animadversión general. Ya aviso de que Maite y Sofía deberían ser intocables por el momento. La audiencia debería cuidar estas dos joyas, que nos pueden seguir dando momentos de incalculable valor. Hoy por hoy, en medio de este arranque tan brillante de edición, las veo absolutamente imprescindibles.
La estrategia de Sofía parece bastante clara. No recuerdo cuál de las chicas decía ayer que a sus 19 años había ido allí a pillar. Sí parece, pero también que pretende distanciarse de las chicas, tal vez para poder después decir que la han rechazado por envidia y porque ella tiene una relación especialmente buena con los chicos. Como esta historia me suena, solo apunto en este segundo escrito tras haber comenzado la edición, que esto es muy posible que suceda.
De igual forma puedo adivinar que Marta pretende protagonizar una reedición de la trama Omar-Lucía en la anterior edición. En primer lugar, su novio se presentó también a los castings, lo cual indica que le gustaría convertirse en concursante. A esto le añadimos que Marta no desaprovecha la ocasión de hablar de su novio al tiempo que tiene interés en sacar el tema de las posibles infidelidades dentro de la casa. Ya en la rueda de prensa donde fue presentada por sorpresa, Marta contestó a Jordi González que no piensa hacer 'edredoning' porque tiene novio. No apostaré sobre ello, pero veo posible que pueda contradecir con sus actos tan temprana afirmación.
Las tramas de secretos y engaños están sirviendo para que el grupo haya pasado directamente a la fase de análisis mutuo, evitándonos vivir los días de exaltación de la amistad, en los que los concursantes repiten su convicción sobre que son los que mejor se han llevado de todas las ediciones. Nada de reunirse todo el grupo sino que en todo momento hay varios grupos que están hablando de los otros. Esto es Gran Hermano en estado puro, aparte de una auténtica delicia, y lo está propiciando ese juego propuesto por el programa.
Ya empezamos a ver con cierta claridad las distintas personalidades, para lo cual también ayuda analizar quiénes están muy metidos en el juego de adivinar los secretos ajenos y quiénes parecen bastante menos interesados. Es, sin ninguna duda, el gran argumento del primer día. Han hecho todo tipo de conjeturas, unas más acertadas que otras. También algunas absolutamente disparatadas. Anoche Quique soltaba una batería de conjeturas a la cual más equivocada. Piensa que Carlos es un deportista de élite, Hans es superdotado intelectualmente y que una de las chicas puede ser hermana de una famosa. El médico (¿de verdad lo es?) no ha dado ni una.
De todas las conjeturas me llaman la atención aquellas que relacionan a Han con Aritz. Algunos piensan que se conocen, incluso que pueden ser pareja. Quique pasó ayer mucho rato intentando sonsacarle a Han si sabe, cree o piensa que Aritz puede ser gay. Lo curioso es que en el vídeo de presentación de Han aparece fugazmente un cartel publicitario con la imagen de Aritz y el rótulo “Vuela”. Parece el anuncio de un disco, y la imagen está sacada del vídeo de presentación del vasco. Ya avisó Mercedes Milá, justo antes de dar paso al vídeo del chino, de que “hay pistas por todas partes”, por lo cual estoy convencido de que esto quiere decir algo y, muy posiblemente, desmiente que Aritz no tenga secreto alguno.
Aunque también podría ser que Han conozca a Aritz, pero no al contrario. Tal vez sea una reedición de aquello que convirtió en concursante a Oliver (GH 9), a quien Pamela, una de las gemelas de Los Palacios, había visto cantar en una audición de ‘Factor X’ y el programa fue en su búsqueda sin que el canario se hubiera presentado a los castings. Ignoro si Aritz lo hizo, aunque ayer afirmó que sí. En cualquier caso, este puede ser un secreto a añadir a aquellos que desconocemos. Por cierto, varios concursantes relacionan a Carolina con Quique, por semejanza de su apéndice nasal. Cualquier cosa vale.
Moleskine del gato
Solo un apunte rápido. O han dejado de dudar de que Han solo hable chino e inglés, o les da lo mismo y han decidido jugar de todas formas con esto. De momento, le hablan todos en inglés. El mismo Han utiliza la lengua de Shakespeare para comunicarse con sus compañeros, aunque ayer le advirtieron de que no podía hacerlo. Ayer varios pasaron mucho rato pretendiendo que dijera frases como “Soy chino, agárrame el pepino”, o la famosa rima con el cinco. La risión.
Dejo imagen de última hora, que muestra a Maite con el rebaño de compañeros con los que le ha tocado convivir.
[Montaje por @Tito_Soy]