El acuerdo entre Arantxa Sánchez Vicario y sus padres parece inviable. Tras la suspensión del juicio durante 60 días para intentar llegar a un acuerdo, el acercamiento de posturas no se ha producido. La situación sigue tensa y complicada y los padres de Arantxa se siguen negando a abandonar la casa en la que residen y así se lo han transmitido al abogado de su hija en la reunión que han mantenido.
Según ha revelado Antonio Rossi, el miércoles 10 de octubre se reunieron los abogados de ambas partes. La reunión duró dos horas y media pero el acuerdo no se produjo pese a que Arantxa ha rebajado sus pretensiones económicas. Según ha explicado el periodista, Arantxa ya no solicita ocho millones de euros sino cinco millones porque necesita ese dinero para hacer frente a la deuda con Hacienda.
El juicio se celebrará en diciembre
El acuerdo entre ambas partes parece imposible. Los padres de Arantxa se niegan a abandonar sus casas y Arantxa no está dispuesta a ceder más y ha amenazado con ir a juicio en diciembre si no se produce el acuerdo.
El padre de Arantxa habla de una mala gestión
Según ha explicado Antonio Rossi, los padres de Arantxa están destrozados y están cerrados en banda a abandonar sus casas. Por su parte, Arantxa considera que su familia son su marido y su hijos. La tenista cree que no va arecuperar la relación con sus padres y su hermano Javier.
Pese a las acusaciones, el padre de Arantxa habla de una mala gestión pero Arantxa les considera responsables de la situación ya que eran los que han manejado el dinero y ella desconocía y no estaba pendiente de los movimientos.