La Liga Nacional de Fútbol sala ha producido el documental 'Ricardinho, magia en sus pies', sobre la llegada de la estrella mundial de fútbol sala a Inter Movistar. Mitele.es estrena en exlcusiva este reportaje de media hora, en el que descubrimos desde los orígenes humildes del jugador hasta su llegada a la élite mundial.
“Lo mejor está por venir”, asegura el ala de InterMovistar cuando habla de su presente en la Liga Nacional de Fútbol Sala. El suyo es un ejemplo de superación y de tesón, una muestra de cómo se puede llegar a lo más alto desde lo más humilde.
Nacido el 3 de septiembre de 1985 en Fanzeres, al norte de Portugal, el astro mundial del futbol sala encontró en las calles de su ciudad el primer contacto con la pelota. Con diez años ya jugaba en un equipo de fútbol once, y le tocó vivir uno de los episodios más traumáticos de su vida. Un incendio en la casa de su abuela les dejaba sin nada. “Mi madre, mi hermano y yo tuvimos que escapar por la ventana”, relata el propio jugador. “Aquello me dio ganas de luchar por todo lo que tengo hoy”.
Tras el duro episodio, la familia ‘Da Silva Duarte Braga’ se traslada al barrio obrero de Sao Joao, en Valbom, a escasos kilómetros de la ciudad de Oporto. “Nosotros nunca tuvimos mucha pasta, así que fue un cambio normal”, asegura entre risas el jugador. “La gente que vivía cerca nos lo dio todo, y nuestra adaptación a Valbom fue muy fácil”. En la cancha de este barrio, de cemento, se forjó e carácter luchador de Ricardinho. El mismo carácter que le ha llevado a ser uno de los mejores jugadores del mundo de fútbol sala. “Cuando iba al colegio a veces me olvidaba del horario jugando al fútbol”
Empezó en equipos de su barrio, pero su gran oportunidad para jugar al fútbol once fue con el Oporto. El entrenador de las categorías inferiores del gran club portugués le descartó por ser demasiado pequeño. Decepcionado, se alejó de la competición y se pasó más de un año y medio jugando en la calle solo o con amigos. En uno de los innumerables partidos en la cancha del barrio, una mujer le descubrió y le animó a probar con el fútbol sala. Un golpe de casualidad que dio paso a una de las carreras más prometedoras del presente de este deporte. Su nombre es Carolina Silva, entrenadora del Gramidense, y ella fue la persona que le abrió las puertas del que sería su destino. “Carolina es la clave de mi éxito, siempre me hablaba de mi calidad y mi humildad”, recuerda Ricardinho.
De la calle a la élite: Miramar, el primer equipo
Su primer equipo en la élite fue el Miramar, al que llegó de un modo muy especial. Varios equipos querían a sólo unos pocos jugadores de Gramidense, pero Carolina Silva veló por todo el equipo y exigió en las negociaciones que se hicieran pruebas a los doce jugadores. Finalmente, el Miramar acabó quedándose diez de ellos. Jose Manuel Leite fue un visionario al abrir las puertas sin reservas a Ricardinho. “José Manuel es mi padre del fútbol sala”, dice emocionado Ricardinho. El que fuera su mentor en la élite, murió en 2011 en un accidente de tráfico.
Después, llegaron su fichaje por el Benfica, uno de los clubes más grandes del mundo, con quien ganó la copa de Europa al Inter Movistar en 2010. Más tarde, sus viajes a Japón y a Rusia, antes de cumplir su gran sueño. Fichar por Inter Movistar y jugar en la Liga Nacional de Fútbol sala, la más prestigiosa del mundo. De la mano de Jose María García, presidente de InterMovistar y su principal valedor en España, el astro portugués ha podido finalmente jugar en el equipo donde siempre quiso estar.
Cumplido este sueño, Ricardinho se ha reservado tiempo y fuerzas para dar a los demás algo de su talento. Así, ha fundado la ‘Escolinha R10’, para enseñar a los niños de su barrio los trucos de magia que él es capaz de hacer con el balón. De momento, hasta que estos pupilos lleguen a lo más alto, los demás seguiremos disfrutando de la magia de los goles y regates del crack portugués.