Suso: "Súper, estoy jugando a ganar"

telecinco.es 29/09/2015 23:38

Durante una fiesta, Enrique intentó volver a tener un acercamiento con Raquel preguntándole si conocía Tarifa, pero ella se lo tomó por otro lado. Raquel se acordó del código de palabras que tenían Juanma y Azahara en ‘GH15’ y llegó a la conclusión que la única intención de Quique era la de tenerla cerca por si en algún momento la necesitaba. Pero si Raquel comenzó pensando eso de Quique, tras varias conversaciones con Suso, ha llegado a la conclusión de que Quique lo que tiene son celos de la relación que ella ha entablado con Suso.

Han sabía que no estaba bien lo que estaba haciendo, pero nada más escuchar a Suso decirle a Raquel que Quique le había llamado “falsa”, no se pudo contener y corrió a contárselo al afectado. Quique se lo ha tomado bastante bien y le ha dicho que él se iba a seguir comportando igual con ellos, pero a Aritz no le ha parecido bien el comportamiento de su amigo Han y le ha regañado.

Raquel aprovechó que la mayoría de sus compañeros estaban en la cocina con Quique para acercarse a él y preguntarle delante de todos por qué le había llamado falsa. Quique se ha quedado a cuadros y le ha asegurado que eso no era cierto, pero Raquel se había creído a Suso a pies juntillas y le ha dicho que éste estaba dispuesto a rebatírselo a la cara. Y dicho y hecho, Suso ha entrado en la cocina y le ha jurado y perjurado a Quique que él llamó “falsa” a Raquel delante suyo. Ante tal situación, Quique se ha limitado a llamar “falsa” a Raquel en ese momento, pero ha mantenido que era la primera vez que lo hacía. El resto de concursantes han comenzado a meterse en la discusión y Aritz, que nunca se mete en nada, ha estallado pidiendo que se callaran porque Quique se estaba comportando como un señor e intentando que la cosa no fuera a más.

Cuando en la casa parecía haber estallado la guerra, Suso ha sido el único que se ha sentido ganador dentro de esta historia. Tras la discusión protagonizada en la cocina entre Raquel y Quique, en la que la mayoría de los concursantes se han posicionado al lado del médico, Quique ha terminado llorando en la habitación con la sensación de que él había quedado de malo y con Raquel en el confesionario muy disgustada y decepcionada con la que había sido su amigo. Nadie podía entender cómo se había podido liar la situación por un comentario sacado de contexto, pero Suso estaba feliz. Él no puede demostrar que Quique va por la espalda porque es un tipo muy educado, pero asegura que él tiene mucha calle y que sabe que Quique no es de fiar.