Miguel tira los trastos a Jorge Javier Vázquez: “¿Tú pillarías conmigo?”

telecinco.es 16/12/2016 02:32

Miguel ya ha conseguido lo que quería y estaba feliz porque con la mano en el corazón se esperaba ser el expulsado. Terminar en el cuarto puesto siempre es muy complicado, pero a Miguel no le ha importado en absoluto porque nunca se había imaginado llegar hasta tan lejos. Jorge Javier Vázquez le ha felicitado porque le había parecido un magnifico concursante, pero le ha advertido que no sabía cómo iba a terminar la entrevista porque a él le gustaba ser sincero e igual escuchaba cosas que no le iban a gustar. Tras ver un vídeo resumen de su relación con Pol y Adara, y lo que ellos habían dicho de él, Miguel ha dejado claro que sí él había pasado el casting sería por algo y que en ningún momento había intentado "retorcer" a la pareja que tantos quebraderos de cabeza le había dado. De repente, Adara y Ana se han metido en la conversación y el presentador se ha visto obligado a expulsar a la defensora de Miguel del plató en mitad de un momento muy tenso.

Retomando el tema del triángulo amoroso, Jorge Javier Vázquez le ha explicado a Miguel que tenía la sensación de que había sido muy poco generoso y el expulsado le ha explicado que para él era muy complicado mostrarle su auténtico aspecto físico a Pol y que en ese momento no estaba centrado. Miguel se estaba yendo por las ramas y Jorge Javier ha tenido una sensación muy clara: "Eres un maravilloso concursante, pero eres un tramposo emocional".

Tras ver un vídeo de uno de los enfrentamientos más arduos de Adara y Miguel, Clara le ha pedido a Adara que pidiera perdón por una vez en su vida, pero ella se ha mantenido en sus trece y ha vuelto a enzarzarse con Miguel. "Es mi momento, pesada", le ha reprochado Miguel al ver que su entrevista se iba a convertir en un interminable cruce de acusaciones, pero no ha conseguido nada y ha sido el presentador el que ha tenido que advertirle a Adara que si la cosa seguía así, la iba a tener que expulsar del plató. El expulsado tenía la sensación de que en una hora de entrevista no iba a tener suficiente tiempo para explicarse, pero Jorge Javier le ha dejado claro que no es Lady Di y que ya le habíamos visto haciendo su show quemando el peluquién en una queimada.

Miguel ha visto cómo se había convertido en ganador de su propia vida en imágenes y ha dejado claro que ese era el único objetivo por el que había venido a 'GH' y que le hacía sentirse ganador, por lo que le daba igual lo que le dijeran. Desde pequeñito Miguel quería ser algo y había hecho todo lo posible para conseguirlo aunque el presentador ha tenido la sensación de que había utilizado su sufrimiento como un espectáculo para conseguir el apoyo de la audiencia y que es un gran showman. Un comentario que a Miguel le ha dado exactamente igual porque no se va a traumatizar por lo que le digan "no puedo pretender porque todo el mundo no me quiera". Respecto al aspecto actual, ha dejado claro que lleva parte del pelo pintado con rímel para dar la sensación de que tiene más pelo. El tema de la Navidad también ha resultado muy polémico y Miguel ha dejado claro que él nunca dijo que no hubiera celebrado la Navidad en su casa, pero sí que desde hace dos años la celebra de una forma más intensa y que está deseando ser papá para vivirla de verdad porque en su casa no han tenido árbol desde que su padre tuvo un accidente cuando él tenía siete años. Respecto a sus problemas de la infancia, el expulsado ha explicado que él se creía el rey del mundo y que en Guadalix se ha dado cuenta de que es mucho más sensible y vulnerable de lo que imaginaba. Miguel es un gran conquistador y ha aprovechado que Jorge Javier Vázquez le dijera que no se volviera a poner el peluquín porque estaba mejor así, para tirarle los trastos: "¿Tú pillarías conmigo?" El presentador le ha dicho que no en un primer momento, pero se lo ha pensado mejor y le ha confesado que eso nunca se puede saber porque él no se cierra a nada.

Al ver su momento queimada con peluquín, Miguel ha tenido claro que se podía ver como una actuación, pero que él era feliz: "¡Viva el amor propio! A mí me la suda que no me entienda nadie, con que una persona me diga "Te entendí", yo soy feliz". Jorge Javier Vázquez ha bromeado con la expulsión de Ana del plató y ha invitado a la amiga de Miguel a regresar y poder dar un abrazo a su amigo. Sin embargo, lo que podía haber sido un momento muy emotivo, se ha convertido en un nuevo enfrentamiento. "Alguien que tiene dignidad y no como tú", así de directo ha sido Pablo cuando Miguel en tono de sorna ha preguntado que quién era el chico que estaba detrás de su amiga Ana.

Muy tranquilo y dibujando un corazón con las manos, Miguel ha conectado con los tres finalistas que aun habitan en Guadalix, les ha dicho que los tres son muy grandes y aunque se ha mostrado muy respetuoso con Meritxell, le ha deseado a sus grandes amigos Rodrigo y Bea que uno de los dos sea el ganador del concurso.

Adara y Pol no han hablado en plató, pero ya se lo había dicho casi todo

"Felicidades por el papelón que ha llevado delante de toda España. ¿Qué se siente al ser el ganador de tu propia vida?", así sin ningún tipo de pudor, ha recibido Pol a su queridísimo Miguel en la sala de reconciliación de 'GH17'. El reencuentro de los amigos no ha podido ser más tenso y Jorge Javier Vázquez ha intentado relajar los ánimos preguntándole a Miguel que qué sentía al ver a Pol con su nueva imagen, pero Miguel no tenía miedo a que Pol le viera con su nueva imagen porque él ya ha sumido quién es. Tras ver un vídeo de su relación, Pol ha vuelto a la carga: "No sé porque no me contaste que te gustaba retorcer las parejas y llevarlas al límite o que te gustan más los hombres heterosexuales que los gays". Unas duras acusaciones que han llevado a Miguel a ponerse serio y reprocharle que hubiera llegado atacándole con cosas del exterior cuando él llevaba tres meses aislado y no tenía las mismas armas. Jorge Javier ha querido centralizar la conversación y le ha preguntado a por la amistad que él había sentido por Miguel y éste le ha reprochado que no hiciera nada por él cuando Adara le montó la de San Quintín. El ambiente se ha ido calentando poco a poco y Miguel ha tenido claro que "dos no juegan si uno no quiere" y que él no le declaró su amor eterno, simplemente le dijo que se sentía atraído por él. Unos amigos más que parece que tampoco van a volver a serlo.

Miguel y Adara se han reencontrado en la sala de reconciliación sin mirarse a la cara y con la intención de decirse lo justo. Adara ha comenzado su primer ataque reprochándole a Miguel que le gustaba "retorcer a las parejas", pero Miguel ha saltado cómo un resorte y le ha parado los pies porque le estaba echando en cara información del exterior que él no tenía. Adara se ha pasado por alto que Jorge Javier le dijera que no utilizara información del exterior y le ha dejado claro que no había podido romper su relación, pero Miguel se ha limitado a dejarle claro que se sentía la ganadora y que se había llevado un golpe de realidad al ser expulsada. Con mucho trabajo, Adara ha reconocido que Pol también era responsable de lo que había pasado con Miguel, quién ha querido puntualizar cómo había sido su relación física con Pol, pero Adara no le ha dejado hablar y se lo ha resumido: "Cuando tú pareja estaba bien contigo no se acercaba a mí, pero cuando estabais mal, venía a buscar mis caricias". Como era de esperar, el cara a cara ha ido subiendo de temperatura y Adara ha abandonado la sala de reconciliación dándole a Miguel la enhorabuena por ser el ganador de su vida. "Me parece muy triste que una persona venga a superar una meta personal y que gente cómo ella te lo tire todo abajo", ha asegurado Miguel indignado por lo sucedido.