Brasil y Chile inauguraron los duelos a vida o muerte en Brasil. Y se notó desde el primer minuto, la intensidad del partido era una marcha mayor que en los partidos de la fase de grupos. Neymar se llevó el primer recado con un 'bocadillo' de dos jugadores chilenos en una de las primeras tomas de contacto en Belo Horizonte.
La primera gran ocasión del partido fue para Brasil. Marcelo controló un rechace en la frontal del área, recortó hacía su pierna zurda pero su disparo salió a un metro del poste derecho de Claudio Bravo. La anfitriona presionaba la salida del balón de Chile pero el equipo de Sampaoli no regala el balón, quería tocar para llegar a Julio César.
Y si Brasil presionaba, Chile asfixiaba a Brasil en el centro del campo. La tensión era máxima en las dos selecciones. Hubo dos caídas en las áreas, una en cada lado. Howard Webb no vio nada en ninguna de las dos pero el banquillo de Brasil se puso en pie ante la caída de Hulk en el área.
La selección de Scolari empezó a llegar con más peligro. Neymar se hizo un lío en una contra y avisó con una falta desde la izquierda. Si Chile ya había visto como Neymar llamaba cada vez con más fuerza a la puerta de Claudio Bravo, Jara no pudo evitar adelantar a Brasil con un gol en propia puerta. El jugador chileno metió la pierna para quitarle el balón a David Luiz, que estaba para empujar la pelota a la red, con tan mala suerte que marcó el primer gol de los octavos de final.
Pero Chile no se rindió tan pronto. Alexis aprovechó un falló en defensa de Brasil para empatar el partido. El jugador del Barcelona se colocó el balón en la pierna derecha ante la pasividad de la defensa amarilla y cruzó abajo ante Julio César. El equipo de Sampaoli había igualado el encuentro y le había cortado la alegría a la afición brasileña.
No tardó la selección de Scolari en reacciovnar y Neymar tuvo dos ocasiones para volver a dar tranquilidad a Brasil. En la primera, el brasileño cabeceó en el punto de penalti pero el balón golpeó en un defensa antes de salir por la línea de fondo. Y en la segunda, el delantero del Barcelona controló con el pecho y se plantó ante Bravo pero quiso meterse hasta la portería y la defensa chilena llegó a tiempo.
Neymar estaba abusando del regate en los últimos metros y Brasil no encontraba el gol. Dani Alves también quiso colaborar en ataque y un disparo desde fuera obligó a Claudio Bravo a estirarse a una mano para sacar a córner. Brasil apretó en los últimos minutos antes del descanso pero los chilenos aguantaron el empate.
En la reanudación en la segunda parte, Brasil dio un pasó atrás y Chile se hizo con el control del partido. Los chilenos tenían la posesión pero tampoco inquietaron a Julio César. Con la selección brasileña pasando un mal momento, llegó el gol anulado a Hulk. El delantero bajó el balón en el área y cruzó ante Claudio Bravo pero Howard Webb no dio el gol por bueno porque consideró que se ayudó del brazo.
Chile se creció con el paso de los minutos y la presión en Brasil era cada vez mayor. Los minutos de Brasil eran de agobio y apareció Julio César. Aranguiz remató en el área pequela de primeras un pase desde la derecha pero el balón se estrelló en el portero brasileño. El equipo de Sampaoli dominaba el centro del campo pero Brasil seguía teniendo mucho peligro a la contra.
Según se acercaba el minuto 90, la presión crecía. Brasil tuvo buenas ocasiones de gol, un cabezazo de Neymar y un disparo de Hulk que hizo que Claudio Bravo se luciera con un paradón. El miedo a perder de las dos selecciones hizo que en los últimos minutos hizo que no hubiera ocasiones demasiado claras y las dos firmaran la prórroga. Y así fue, ninguna pudo ganar en 90 minutos y el primer partido de los octavos de final se alargó.
Ni Brasil ni Chile aparecieron con prisas en la prórroga. El pánico a perder en las dos era terrible. Jo, que había salido por Fred en la segunda parte, se llevó la tarjeta amarilla por una entrada con la plancha a la altura del pecho de Claudio Bravo, una falta que recordó a la De Jong a Xabi Alonso.
En la prórroga, Chile dio un paso para atrás y esperó a Brasil. Los penaltis estaban cerca y los chilenos los veían como la oportunidad más 'real'. El cansancio se notaba cada vez más y el balón era de Brasil. En la primera parte de la prórroga, Brasil dominó y Chile comenzó a notar mucho el bajón físico.
Medel llegó a su límite en la segunda parte de la prórroga. El jugador del Sevilla se marchó llorando pero ya se había dejado todo sobre el césped. Chile se defendía como podía, resistir era tener la oportunidad de poder eliminar a Brasil en los penaltis, la grada de Belo Horizonte contenía la respiración por momentos. Pinilla estuvo a punto de meter a Chile en cuartos con un disparo al larguero en el descuento de la segunda parte de la prórroga. No entró y llegaron los penaltis.
En la lotería de los penaltis, David Luiz, Marcelo y Neymar marcaron los goles de Brasil y Aranguiz y Díaz anotaron en Chile. Julio César fue decisivo en la tanda de penaltis y Brasil consiguió el billete tras un encuentro agónico y en el que la selección amarilla sufrió mucho para pasar de octavos.