“He estado hablando con mucha gente del reality, con compañeros que no veía desde hace 14 años y estuvimos hablando de Lydia, de ‘Sálvame’…”, comenzaba a decir Kiko Hernández y se dirigía a su compañera, Lydia Lozano: “He sido muy injusto contigo en este programa, no sé si vamos a estar trabajando un año, dos, tres, cinco… pero ojalá haya suficiente tiempo para que me perdones todo lo que te he hecho”.
A Lydia Lozano se le saltaban las lágrimas, Kiko Hernández se levantaba y ambos se fundían en un largo abrazo. Emocionado, el colaborador se marchaba del plató y Lydia decía: “Para mí ha sido un regalo”. Explicaba que siempre ha sido una mujer “muy positiva” y que se quedaba con lo bueno: “Los mejores años los he pasado con Kiko y siempre me quedo con lo bueno”.
Kiko regresaba al plató, explicaba que le gustaría mantener una amistad con ella “fuera de plató” y necesitaba decirlo: “Sé que es complicado y difícil a una persona que le has hecho daño, pues que te perdone, no quiere decir que no vayamos a discutir o a pelearnos en plató”, explicaba. “Lydia es muy importante para mí, lo ha sido y lo será”, decía el colaborador, recordaba que le ayudó cuando empezó en televisión y confesaba: “no es justo el pago que le he dado”.
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Ante las preguntas de Paz Padilla, aseguraba que echaba de menos a su compañera y explicaba por qué ha dicho estas palabras en público: “Creo que se lo merece, también por su gente, por su familia y por sus amigos”.
Lydia Lozano acepta las disculpas. Paz le preguntaba si iba a perdonarle y ella decía: “Le he dado un abrazo, si no, no se lo hubiera daño, no me lo tendrías que preguntar, ha sido un regalo”, decía.
Y hubo más. El colaborador también quiso disculparse con el marido de su compañera: “Charly, le he pedido perdón a tu mujer y te pido perdón a ti también, lo siento”.
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