Belén Esteban apoya a Carmen Bazán sobre su supuesto accidente a la salida de Ambiciones

TELECINCO.ES 03/09/2010 17:47

El pasado jueves, a eso de las 19:00 h., Isabel Doña no sospechaba que el destino iba a salir a su encuentro en la misimísima puerta de Ambiciones. Isabel, que esta tarde ha intervenido telefónicamente en 'Sálvame', asegura que iba conduciendo por las inmediaciones de la vivienda de los Janeiro cuando se topó de frente con el coche de Carmén Bazán. "Gracias a Dios que iba a una velocidad normal", recuerda esta mujer, que cuenta cómo Bazán salió sin mirar y ella tuvo que zigzaguear para no llevársela por delante, con el peligro añadido de tres coches que venían en sentido contrario: "La que iba a tener un accidente era yo", aventuró.

Su versión difiere totalmente de lo que Carmen Pardo y Andreíta le han contado a Belén Esteban. La de San Blas, que probablemente se ha resignado a venir al programa un viernes y tener un fin de semana como el común de los mortales, está convencida de que su ex suegra no cometió ninguna imprudencia al incorporarse a la vía, y tuvo sus más y sus menos con la supuesta heroína que, indignada, exigía que Carmen le diera las gracias por su hazaña al volante.

Sin cinturón ni sillita

Aún no entendemos muy bien cómo, con la cantidad de prensa congregada a la puerta de Ambiciones, nadie ha podido facilitarnos las imágenes de la secuencia completa desde la salida del coche de Carmen Pardo de Ambiciones hasta el famoso accidente, ya que el vídeo se corta en el momento clave del suceso. Sí podemos ver que una de las niñas viajaba en el asiento del copiloto, y el resto de pequeños detrás, sin sillita ni cinturón de seguridad, algo que hasta Belén ha reconocido como una temeridad y un grave error de la madre de Jesulín. Además hemos escuchado a un testigo, un fotógrafo que asegura que allí podría haber ocurrido "un percance bastante fuerte".

Con la ayuda de nuestro reportero José Antonio, al que desde aquí le deseamos una felices vacaciones, hemos podido reconstruir los hechos de forma muy simple y sí es cierto que se aprecian algunas irregularidades respecto a lo que el jueves nos relataba el colaborador Pablo González. No existe la señal de Stop a la salida, ni hay marcas de frenazos. Además la carretera junto a la finca describe una recta con visibilidad suficiente para que los coches frenen sin problemas si van a la velocidad adecuada, tal y como sostenía Belén. Indicios que le suman puntos a la hipótesis de que esta historia se ha engordado a base de exageracion y oportunismo.