Mila Ximénez tuvo que enfrentarse, el pasado viernes 19 de noviembre, a una de sus entrevistas más duras. La colaboradora de 'Sálvame' tuvo que hacer frente a las graves acusaciones de Rodríguez Menéndez. Pero Ximénez no es el único blanco del huido de la justicia, también Karmele Marchante podría ser uno de sus objetivos.
Pero ella no parecía tener miedo. Karmele Marchante había anunciado en el plató de 'Sálvame' que estaba reuniendo documentación sobre Rodríguez Menéndez y, al parecer, estas declaraciones han podido tener consecuencias. Según relata la propia colaboradora, en la mañana del miércoles 24 de noviembre se ha sentido perseguida por un vehículo con las lunas tintadas.
La colaboradora no estaba presente en plató pero las cámaras del programa se desplazaron hasta su casa para comprobar cómo estaba. Karmele nos contaba que su pareja había visto un coche negro, un Audi con las lunas tintadas, cuando salía de casa. Horas más tarde, mientras Karmele conducía veía cómo un coche igual a esta descripción le seguía: "Se ha aproximado por la izquierda al mío, han abierto un poquito el cristal de la persona que conduce y han exhibido un objeto que no he sido capaz de identificar, pero la siguiente ventanilla se ha bajado han dicho unas palabras que no he podido oír". La colaboradora seguía su relato añadiendo que, cuando ha llegado a su casa, ese mismo coche estaba parado en una calle adyacente.
Tras estos acontecimientos, Karmele ha hablado con su abogado, "uno de los grandes expertos en Rodríguez Menéndez", el letrado el ha aconsejado que esté tranquila y aventura que "es posible que haya contratado a cuatro macarras para meterme miedo".
Karmele dice no tener miedo pero tomará precauciones: "Saldré acompañada, no estoy sola en casa, mi casa es muy segura" y anuncia: "Voy a continuar recopilando la información, hay mucha que no ha salido".