Alba Carrillo y su madre cogieron su petate dispuestas a abandonar ‘Supervivientes’ tras una discusión con Laura Matamoros en la que los reproches y descalificaciones volaron en ambas direcciones. A Kiko Matamoros no le gusta la actitud de su hija, censura que le haya insultado pero reitera que nada de lo que dijo es mentira: “Ellas pueden decir lo que les dé la gana pero no se las puede toser porque salen corriendo”.
Laura defendió a su padre tras unos comentarios y Kiko, aunque entiende su reacción, explica que le sabe mal por ella: “Si de mí dependiera, que lo olvide, porque cuando las cosas vienen de alguien normal te pueden hacer pensar, pero cuando vienen de gente que son lo más parecido a un fallo de Dios hay quedarles la importancia que tiene, que es poca”.
Pero hubo más, tras abandonar, Lucía dedicó una larga lista de adjetivos a Laura además de decir que no tiene estudios y que en lugar de leer va a la discoteca. Es más, estaba tan segura de sus palabras que quería que se lo pusieran a Kiko Matamoros.
Así ha sido y, como era de esperar, Kiko ha respondido rotundo: “Mi hija lleva trabajando desde los 18 años, ha estado de camarera en Londres, arreglando camas en un hotel, estudiando idiomas, buscándose la vida, con honestidad, con mayor o menor acierto, como quiera, pero desde los 18 años (…)Tu hija sí es una excepción, es la trepa número uno que ha hecho de su relación con los famosos una profesión a los que luego ha vendido, ha criticado despiadadamente, ha calumniado y difamado. Eso sí me daría asco de mi hija, que no lo ha hecho y lo ha podido hacer”.
Además, le ha advertido que Laura ha sido “hiperprudente” con la información que tiene porque él tiene la misma: “No menees ese árbol no te vayan a caer encima las nueces”.
“No necesito cuatro horas para despiezarte y lo vas a comprobar”, ha dicho Matamoros en respuesta a sus palabras y asegura que lo que más le duele es ver “cómo se victimizan dos verdugos”.
“He visto a perros callejeros que tratan con más respeto a sus crías”, ha dicho Matamoros utilizando las palabras de Lucía y es que cree que la madre ha hecho un negocio “de que a la hija le den palos”, alguien para quien también tiene palabras: “Vas de supermodelo y eres una superchoni”.