Que sí, que ver a Alba Carrillo, Laura Matamoros o Edmundo Arrocet luchando por sobrevivir está bien; que sí, que ver a Leticia Sabater matando el tiempo mientras interroga a sus compañeros tiene su punto; y por supuesto, Juanmi, haga lo que haga, nos hace sonreír. Esto lo tenemos claro, pero como a veces pasa en la vida, queremos más, y como soñar es gratis…
No digáis que no habríamos flipado con un ‘Supervivientes’ con algunas de nuestras más queridas folclóricas como protagonistas. Así por ejemplo: Rocío Jurado, Lola Flores, Sara Montiel, Marujita Díaz… ¡No habríamos dado abasto con los vídeos! Así que vamos a dejar volar nuestra imaginación:
Imaginad a la gran Lola Flores rodeada de mosquitos y pidiéndoles que la dejen vivir: “¡Si me queréis, irse!” o buscando su pendiente entre la arena de Playa Uva. Sería también ideal para poner firmes a aquellos concursantes que les dé por desarrollar el don de la vaguería: “Los espectáculos no deben faltar nunca, ¡que no sea solo el bingo!”, pero aún más genial sería, sin duda, para amenizar los largos días de concurso: “¿Y cómo me las maravillaría yo?”.
¿Y cuando se juntara con su gran amiga Rocío Jurado y le dijera que es “una piedra dura de Chipiona que no se puede aguantar”? ¡Canelita en rama! La Jurado sería la madre de todos, seguro. Con su dulzura y su paciencia cuidaría a todos sus compañeros, pero ¡ojo!, cuidado con sacarla de sus casillas, que nos jugamos un zasca: “No vengo más nunca a Playa Uva”. Con su nervio, ese que siempre hemos visto reflejado encima del escenario, iría de allá para acá a buscar comida, eso sí dejando algo muy clarito: “No soy Rambo”.
No podía faltar en nuestra edición coplera la grandísima Sara Montiel. La vemos totalmente en modo “fumando espero”, algo que puede que generase algún tipo de rocecillo entre las hiperactivas Lola y Rocío, pero tenemos clara la respuesta de Sara a la bronca de sus amigas: “¿Pero qué pasa? ¿Pero qué invento es esto?”. Eso sí, en Playa Uva estaría en su salsa y haría topless sin tapujos: “Yo siempre he estado con las domingas fuera. Y sigo con las domingas fuera: a los ochenta, a los cuarenta y a los treinta. Siempre con las tetas al aire”.
Y, ¿no creéis que falta alguien para completar nuestro casting particular? Qué sería de Sara Montiel sin la que fuera su gran amiga y más tarde su gran enemiga Marujita Díaz. La comida no sabemos, pero la risa estaría asegurada… y las discusiones muy probablemente también, porque ya sabemos que ella hace lo que le “sale del kiwi”. Aunque lo mismo se entretiene buscando algún garífuna para ‘entablar conversación’ o hacer un “intercambio cultural” como le sucedió con Dinio.
¿Sería o no sería “Maaaarvelouuus”, como diría Sara? Anda que no daríamos una peseta de muy buen gusto para poder ser testigos de semejante estampa y no se nos rompería el amor de tanto verlas, pero los sueños, sueños son, así que “¡chimpún!”, ya toca despertar. ¿Pero habría sido una grandiosísima edición o no? ¡Nos hubiera encantado!