El programa ha podido hablar con una enfermera que trabajó con Sor María. Aunque ha preferido permanecer en el anonimato, su testimonio es duro y desgarrador: "La llamaban la buitre porque era una mujer de armas tomar. Lo que decía cuando llegaba un niño era que no se lo enseñasen a nadie y en la incubadora ponía un cartel, no enseñar al niño. A las matronas les pedía que escribiesen en una libreta las solteras que ingresaban para después ir a verlas. Presencié a una chiquita que quería dejar a su bebé, después se arrepintió y le quitó la niña de los brazos".
El testimonio de Ignacia, exlimpiadora del Hospital Santa Cristina
Ignacia trabajó con Sor María en el hospital Santa Cristina y define a la monja como "una encantadora de serpientes". Reconoce haber llegado a dudar de su muerte, ya que nunca nadie ha visto el cuerto y fue enterrada antes de que pasase el tiempo mínimo estimado.
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"La planta 4, según definición de Sor María, era la planta de las descarriadas, mujeres embarazadas, muy jovencitas y solteras. Yo he visto ingresar en San Ramón, una clínica privada, a mujeres sin tripa y a los dos días tener un hijo", ha asegurado Ignacia.
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La exlimpiadora de la maternidad en la que trabajó Sor María, ha asegurado haber visto a un bebé congelado: "Lo guardaban en la morgue y lo tenían allí para enseñárselo a las madres que lo pedían, pero los niños nacen con una temperatura corporal que no es esa".
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Se puede decir que estamos ante el mayor escándalo de la historia reciente de nuestro país. Se estima que el caso total de niños robados puede alcanzar la cifra de 300.000. En la actualidad existen 4.000 casos registrados y 1.800 denuncias a la fiscalía. Gracias a estas denuncias, la justicia ha conseguido imputar a 40 personas. Sin embargo, a día de hoy, la cifra de condenados por el caso de los niños robados es cero.