Exclusiva | El librero de Ciudad Real: "Solo disparé para asustar. A ese hombre lo trajeron aquí muero"

  • El jurado declara culpable de homicidio al librero de Ciudad Real que mató a un intruso en su finca

  • Siete de los nueve integrantes del jurado popular han considerado al procesado culpable de este delito

  • José Lomas ha sido declarado culpable por homicidio

La semana pasada, el jurado que juzgaba en Ciudad Real al librero octogenario José Lomas por matar de dos disparos a un intruso que entró en su finca en agosto de 2021 lo declaraba culpable de un delito de homicidio con dolo eventual.

Ahora, 'Vamos a ver' ha podido hablar en exclusiva con él en una entrevista en la que se ha mostrado tranquilo y confiando en que pronto se conozca la verdad. "Yo tenía miedo porque no sabía si podía ser una persona o si podía ser algún artificio explosivo, por eso nunca me acerqué. Esos dos disparos y con esa precisión solo lo puede hacer un matador", asegura.

Además, repite que él no disparó y da su versión de lo ocurrido: "Le trajeron aquí muerto. Yo no me siento culpable y estoy tranquilo porque sé que saldrá la verdad", ha asegurado durante esta entrevista.

El 'libreo de Ciudad Real: "Tenía miedo porque no sabía si podía ser una persona o un artificio explosivo"

"Un juzgado popular puede juzgar, pero tiene sus puntos débiles. Yo soy incapaz de hacer esos dos disparos tal y como creo que se hicieron. Yo no soy capaz de hacerle eso a un ser humano y únicamente disparé para asustarlos", continua explicándonos.

Siete de los nueve integrantes del jurado popular, que desde el pasado viernes venía deliberando sobre el objeto del veredicto que les entregó la presidenta del tribunal, han considerado al procesado culpable de este delito. Asimismo, el jurado ha considerado probada la eximente incompleta de anomalía psíquica de Lomas y la atenuante de confesión. 

Por parte de la Fiscalía, que en un principio pedía doce años de prisión para el octogenario, ha rebajado su pena a los seis años de cárcel, teniendo en cuenta los eximentes y atenuantes tras escuchar el veredicto del jurado.