La indignación de un hombre de 70 años al que le okupan la casa por segunda vez: "No tiene sentido"

La víctima durmió fuera una noche y le okuparon el domicilio de nuevo
El señor duerme en una pensión porque no tiene a dónde ir
La familia okupa quiere molestar a otro vecino, constructor, por un litigio con unos alquileres
Un nuevo caso de okupación en Cambrils, Tarragona, es la de José María, un hombre de 70 años que tiene que dormir en una pensión porque varias personas, dos adultos y dos adolescentes, han entrado y se han asentado en su casa por segunda vez. Ya en el confinamiento tuvo que marcharse con su hermano porque le habían okupado su chalet y parece que lo hacen para molestar a otro vecino al que le tienen okupadas otras dos viviendas. 'El Programa de Ana Rosa' ha acompañado a José María Calderón a la pensión en la que está viviendo ahora por 36 euros al día que paga de su bolsillo.
Este hombre no tiene apenas ropa, la mayor parte de sus pertenencias se encuentran dentro de su casa y no le dan oportunidad de poder recuperarlas. Los vecinos se han solidarizado con José María y se han presentado en la puerta de su chalet para manifestarse e internar ayudarle. Mientras este hombre tiene que pagar una pensión y no puede estar en su propiedad, esta familia disfruta de este chalet y no dan pie ni siquiera a escucharle. El reportero de 'AR' intentaba hablar con ellos y lo único que ha conseguido son malas formas, amenazas y una negativa a dar su versión: "Que te den por culo, no me vais a grabar. Va a venir el 112 y os va a sacar de ahí, que lo sepáis".

Además, han querido estar en directo con este hombre, víctima de los okupas, para que cuente la última hora de la situación que está viviendo: "Voy a casa de mi hermano a comer y me quedo a dormir, al día siguiente me vengo con él y nos encontramos okupada la casa. La pensión son 36 euros diarios, es un hostal que está digna, peor no es mi vivienda. No tengo nada, no tengo mis cosas". Sobre las personas que le han okupado: "Tienen otras dos viviendas okupadas y visten de Prada, no tiene sentido que estén aquí. Yo he hecho denuncias todos los días, los Mossos no te permiten hacer nada, cuando me asomo a mi casa me amenazan". Además han conocido la versión de uno de los vecinos que está sufriendo las malas formas de esta gente: "Insultos, amenazas, intentos de agresión. La piscina la hemos tenido que clausurar, estaba llena de heces, de comida, de suciedad. Los niños no salen de casa".

