Tras ocho años de relación y cuatro hijos en común, Álvaro Morata y Alice Campello anunciaban el pasado mes de agosto a través de sus redes sociales su separación de mutuo acuerdo tras "muchas incomprensiones" que poco a poco habían desgastado su matrimonio. Asimismo, insistían en que no había terceras personas ni "faltas de respeto". La suya fue una de las separaciones más inesperadas y sorprendentes de 2024.

El impasse en su matrimonio terminó cinco meses después, y en enero, en medio de los rumores de una posible reconciliación, la influencer y el futbolista confesaban que habían decidido dar una segunda oportunidad a su historia de amor.

Ahora, la popular familia ha comenzado una nueva vida en Turquía tras el fichaje del jugador por el Galatasaray. Es allí donde ahora disfrutan de su nueva rutina mientras ultiman los detalles de la que será su residencia en Madrid cuando Morata se 'jubile' del fútbol.

Campello, que acaba de cumplir 30 gloriosos años, ha decidido abrir las puertas de su chalé en la capital española antes de regresar a Turquía y ha hablado como nunca sobre Morata y sobre lo que sucedió el año pasado en su matrimonio. 

"Lo que nos pasó fue un tema de estar bien con nosotros mismos. Yo no estaba bien. Yo venía del embarazo de Bella, que cuando di a luz lo pasé muy mal y llevaba muchos meses muy mal y no me había recuperado ni física ni mentalmente. Álvaro igual, por otros motivos personales, y los dos no supimos salir. Cuando uno está bien y el otro mal en la pareja, el que está bien te puede ayudar a salir de ello, pero si los dos estáis mal, es muy difícil", ha confesado a la revista '¡Hola!', que publica su entrevista este miércoles 12 de marzo.

"Con ayuda de profesionales, todo es posible", ha aclarado la creadora de contenido, revelando así los motivos que les llevaron a distanciarse por un tiempo. "Somos muy pequeños todavía, hemos vivido muchas cosas y es normal también que a veces tengamos todavía inmadurez en algunos aspectos, porque yo siento que hemos tenido mucha inmadurez en cómo lo hemos llevado. Pero cuando una persona no está bien, a veces no sabe gestionar las cosas de la mejor forma".

Para Campello, ese tiempo alejada de su marido le ha servido para "madurar muchísimo" y, sobre todo, "para valorarnos todavía más el uno al otro". También considera que "en el dolor descubres partes de ti que no conocías y sacas una fortaleza que no sabías que tenías".

La empresaria tiene claro que esa ha sido "la época más dura de mi vida", pero también "la que más me ha enseñado". "Cuando tú te separas, echas de menos todo de esa persona. Y ese echar de menos, al final, te hace valorar muchísimo lo que tienes", ha resaltado.

Alice ha hecho "un autoanálisis" y se ha dado cuenta de que "quizá yo hacía cosas que le afectaban a él y de que realmente yo tampoco estaba bien conmigo misma". Por ello, durante ese casi medio año se ha dedicado a hacer "un trabajo en mí muy profundo, al igual que Álvaro lo ha hecho en él". Y cuando los dos han vuelto "a estar bien, hemos podido trabajar en nosotros y recuperar todo". "Yo realmente sabía que, cuando el amor es grande, al final las cosas se solucionan, pero sí que es verdad que hemos tenido momentos muy oscuros", ha señalado a la cabecera rosa.

Sobre ello, la esposa del deportista de la selección española ha subrayado que "hay épocas en que, como nos ha pasado, lo ves absolutamente todo negro, porque puede que no estés bien contigo misma. Y nosotros coincidimos en un momento en el que los dos todo lo veíamos negro". "Pero luego, cuando desaparece la rabia, cuando se va el dolor que tienes contigo mismo y vuelves a ver las cosas claras, te das cuenta de que el amor puede con todo", se ha alegrado.

Ahora se encuentra "muy feliz" de haber "peleado mucho" por su "amor verdadero" e ilusionada con esta nueva etapa en sus vidas.

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