Jessica Bueno estalla tras las críticas por irse de vacaciones sin sus hijos y explica de dónde saca el dinero para sostener su lujosa vida

La exconcursante de 'Supervivientes' se pronuncia sobre su economía tras presumir de una vida repleta de lujos
Jessica Bueno, de vacaciones con sus hijos en una "ciudad fantasma": su hotel de lujo entre las 'ruinas' de Marina d'Or
Jessica Bueno estalla tras las críticas por irse de vacaciones sin sus hijos y explica de dónde saca el dinero para sostener la lujosa vida de la que no ha parado de presumir en sus redes durante todo el verano. La exconcursante de 'Supervivientes', que denunciaba a Jota Peleteiro por no responsabilizarse de la manutención de sus hijos y se mudaba de Sevilla a Bilbao debido a su delicada situación económica, no ha parado de viajar en todo el verano y de hacer planes que no todo el mundo puede permitirse.

En los últimos días, además, ha sido pillada a bordo de un barco con un misterioso hombre. Un hombre que, como ella misma ha explicado, no se trata de ninguna nueva ilusión, sino del capitán del barco que ha alquilado durante sus vacaciones con amigas. La exconcursante de 'Supervivientes' está viviendo un verano a cuerpo de reina y con todo tipo de lujos. A este viaje sus hijos Fran, Jota y Alejandro no la han acompañado.
Enfadada por aquellos que opinan que les ha 'abandonado', Jessica ha decidido enfrentarse a las críticas y ha reivindicado su derecho de poder viajar y hacer planes sin sus hijos, que también tienen unos padres. "Me sienta un poco mal", ha reconocido a través de sus redes sociales, lugar a través del cual ha explicado un poco por encima el convenio regulador y la custodia que tiene establecida con Kiko Rivera y Jota Peleteiro, progenitores de sus niños.
"Mis peques en verano están 15 días con sus padres y 15 días conmigo. Las primeras quincenas les tocan a ellos, entonces, al estar en la primera quincena están con sus padres. Entonces es cuando yo ahí aprovecho para hacer planes sin ellos, porque no están conmigo. Por supuestísimo, cuando vuelvan, voy a exprimirlos al máximo esas dos semanas de agosto para hacer planes con mis peques. Luego, desde septiembre a verano, el día a día están conmigo siempre", ha asegurado la modelo.

"Justamente este año, desde septiembre voy a estar fuera, ojalá dos meses, porque me voy a trabajar", ha dicho haciendo referencia a su participación en la segunda edición de 'Supervivientes All Stars', en la que ha sido la primera concursante confirmada.
Jessica ha querido explicar además el motivo por el que puede permitirse vestir con ropa de primeras marcas, hospedarse en hoteles de 5 estrellas o vivir experiencias (como la de pasar un día entero navegando a bordo de un velero por las cristalinas aguas de Ibiza), cuando hace solamente unos meses confesaba que debido a que su exmarido no pagaba los colegios de los niños se debían más de 40.000 euros.

"Para los que os preocupáis por mis ahorros y mi economía, no sé si os dais cuenta de que cada vez que yo pongo 'colaboración' o 'publi', es trabajo", adelanta mientras confiesa que la mayoría de sus publicaciones son colaboraciones pagadas o cesiones comerciales.
"Yo estoy trabajando ahí. O me están pagando o me están cediendo el producto o la experiencia a cambio de la publicidad que yo les pueda hacer. Yo no estoy gastando nada ahí", explica la influencer, que hace poco cambiaba de representante y ha sabido explotar y rentabilizar al máximo su faceta como creadora de contenido.
"Afortunadamente desde febrero hasta aquí" - exactamente cuando se produjo su ruptura con Luitingo -, he trabajado y he hecho muchísimas publis en redes sociales, he trabajado como colaboradora y, gracias a Dios, si me quisiera ir de vacaciones con mis hijos o con mis amigas, porque también me lo merezco, pues podría", asegura.
Tal y como ha confesado, las vacaciones en el hotel de lujo de la antigua Marina D'or de las que disfrutó con sus hijos durante la segunda quincena de julio fue "una colaboración" y la casa rural a la que un mes antes se iba con amigas y sin niños más de lo mismo.

