La relación entre el rey Felipe VI y Guillermo de Luxemburgo: parentesco, encuentros y diferencias entre ambos
Este 3 de octubre, el gran duque Enrique de Luxemburgo pone fin a su jefatura de Estado a favor de su hijo Guillermo
El entorno íntimo del rey Felipe: amigos de la infancia, compañeros militares y los que comparte con Letizia
Este 3 de octubre, el gran duque Enrique de Luxemburgo pone fin a su jefatura de Estado tras 25 años. Lo anunció él mismo en su discurso de Navidad de 2024, confirmando que abdicaría a favor de su hijo mayor, Guillermo, quien se convertirá en el nuevo gran duque.
Guillermo ya ejerce buena parte de las responsabilidades como 'Lieutenant-Représentant' -príncipe regente-, figura que le permite sustituir a su padre en numerosos actos oficiales. Y ahora, la relación que mantiene con otros monarcas europeos cobra un interés especial y, en nuestro caso, destaca su vínculo con el rey Felipe VI.
Sus encuentros
La relación entre el soberano español y Guillermo no es de amistad íntima. Han coincidido en distintos escenarios europeos, desde cumbres institucionales hasta funerales de Estado. En todas esas ocasiones, el heredero luxemburgués y el rey español han mantenido contacto dentro de la estricta cortesía protocolaria.
En 2012, cuando Felipe y Letizia todavía eran príncipes de Asturias, acudieron en calidad de invitados a la boda de Guillermo de Luxemburgo y Stéphanie de Lannoy, que tuvo lugar en la Catedral de Nuestra Señora de Notre Dame. Ese fue uno de los primeros encuentros directos entre ambos.
En 2014, poco después de la proclamación de Felipe VI, los reyes hicieron una visita oficial al Gran Ducado. Allí fueron recibidos por el gran duque Enrique, la gran duquesa María Teresa, y Guillermo, entonces aún heredero. Allí pudieron estrechar lazos y compartir más confidencias.
Aunque no se les ha visto compartir actos de manera tan frecuente como el padre de la princesa Leonor con otros monarcas europeos -como Carlos III de Reino Unido o los soberanos de Bélgica y Países Bajos-, se espera que tras la abdicación de Enrique, su relación con Guillermo cobre mayor protagonismo.
Luxemburgo, como monarquía parlamentaria, mantiene un trato constante con las casas reales europeas, desde intercambios de visitas hasta actos de Estado, bodas, funerales o aniversarios dinásticos. En ese sentido, Guillermo y Felipe probablemente se vean con más frecuencia en los próximos años.
Una relación más allá del mundo 'royal'
Sin embargo, no sólo les une el mundo 'royal', también familiar.
La esposa de Guillermo es prima segunda del rey Felipe VI y prima del rey Juan Carlos I, ya que su madre es la princesa Olimpia de Torlonia y Borbón y su abuela es la infanta Beatriz de Borbón y Battenberg, hermana de don Juan de Borbón -padre del emérito y abuelo de Felipe-.
Diferencias
A Felipe y Guillermo los separan 13 años, -de 1968 y 1981 respectivamente-, por lo que sus trayectorias han sido distintas.
Felipe VI estudió Derecho en la Universidad Autónoma de Madrid y se formó en relaciones internacionales en Georgetown, además de completar su paso por las academias militares. Guillermo, por su parte, se graduó en Ciencias Políticas en la Universidad de Anglia Ruskin, en Reino Unido, y en el Institut Albert-le-Grand, en Francia.
Además, el jefe de Estado español se convirtió en príncipe de Asturias con tan solo nueve años, en 1977, ocupando ese puesto durante casi cuatro décadas, hasta que ascendió al trono en 2014.
Mientras tanto, Guillermo no fue príncipe hasta el año 2000, a punto de cumplir 19 años, cuando Enrique de Luxemburgo accedió al trono tras la también abdicación de su padre, Juan. De este modo, su cargo como príncipe ha abarcado 25 años. Desde octubre de 2024 ha actuado como príncipe regente, ocupándose ya desde entonces de la agenda oficial de Luxemburgo.
Es decir, que Felipe VI se convirtió en rey con 46 años, y Guillermo lo hace con 43.
Otro aspecto que les diferencia son sus hijos. Por un lado, Felipe VI solo tiene hijas mujeres, la princesa Leonor y la infanta Sofía, de 19 y 18 años respectivamente. Por otro lado, Guillermo solo tiene dos hijos varones, Carlos y Francisco, de cinco y dos años.
Si hay alguna semejanza entre ellos es el contexto en el que suben al trono. Felipe accedió tras la abdicación de Juan Carlos I, en un momento complejo para la Corona española, y Guillermo también a causa de la abdicación de su progenitor.