Platos prohibidos y vino: así es el menú de los cardenales durante el cónclave

Durante los días que dure el cónclave para elegir al nuevo papa unos chefs se encargarán de cocinar para los cardenales
Se les preparan platos ligeros y completos y hay alternativas para aquellos que tengan alguna intolerancia o alergia
El vino también tendrá presencia, pero en cantidades moderadas y bajo pedido previo
El fallecimiento del papa Francisco ha sido uno de los acontecimientos de las últimas semanas que ha hecho que el mundo tenga el ojo puesto sobre El Vaticano con el entierro y ahora con el cónclave en el que se elegirá a su sucesor. La Capilla Sixtina será el escenario donde se desarrollarán las votaciones entre los cardenales y se estima que el cónclave puede extenderse varios días, aunque algunos cardenales defienden que durará "lo que tenga que durar", hasta que aparezca la fumata blanca que indique al mundo que ya hay nuevo papa.
Durante las jornadas que dure el cónclave los cardenales, más allá de votar hasta llegar a un consenso, tendrán que alimentarse. Todos ellos se alojarán en la Casa de Santa Marta, lugar donde residía el papa Francisco y donde se mantendrán aislados hasta nombrar al nuevo pontífice, con restricciones de teléfonos móviles, aparatos electrónicos y entradas y salidas controladas.
Platos ligeros y completos
Por eso mismo cocineros y camareros son seleccionados previamente para que cumplan las normas, teniendo que firmar un juramento de confidencialidad sobre la divulgación de información e incluso para subrayar que no se permite ningún tipo de comunicación con los cardenales más allá de los estrictamente necesario, según detalla el medio italiano La Repubblica.
Los chefs que trabajan durante esos días ya lo han hecho en El Vaticano o en otras instituciones, ofreciendo platos sencillos y ligeros, pero completos. Por ejemplo, para el desayuno los cardenales tienen siempre disponible café y té con pan con mermelada. En el caso de la comida, se les sirve entrante, plato principal con guarnición y fruta de temporada, un menú similar al de las cenas, que suelen ser algo más ligeras para facilitar la digestión.

¿Qué comerán?
En cuanto a qué es lo que se les sirve en esas comidas, los menús pueden variar en ocasiones para algunos de los cardenales, teniendo en cuenta siempre las circunstancias de cada uno, como puede ser alguna alergia alimentaria o una intolerancia. Sin embargo, estando en El Vaticano la gastronomía italiana tiene un gran peso en los menús que se sirven durante los días de conclave.
Por ejemplo, las pastas y los risottos son comunes en los menús de esas largas jornadas, pero también hay lugar para pescados o carnes blancas, además de verduras hervidas. Los platos que lleven relleno no son comunes en estos casos por un motivo claro: que no se puedan introducir mensajes ocultos.
En cuanto a bebida, lo cierto es que más allá de agua hay disponible vino para los cardenales. Eso sí, no es un festín, ya que se les ofrece en cantidades moderadas bajo pedido y otras bebidas que tendrían disponibles en una especie de minibar que hay en las habitaciones de Santa Marta donde se quedan durante el cónclave.
Precisamente ese minibar fue el protagonista de un cónclave pasado, según contó el arzobispo jubilado Anselmo Guido Pecorari, al medio Corriera della Sera. "No puedo decirle su nombre porque es un gran amigo mío, pero un cardenal extranjero que creía que todo era gratis invitó a unos colegas a su habitación a charlar después de cenar, y así terminaron todos los licores del minibar. Solo entonces los encontró en la cuenta y se molestó", explicó al medio de comunicación.

Sus comidas antes de empezar el cónclave
Antes de su encierro, que no se sabe cuánto durará, muchos de los cardenales han comido en restaurantes cercanos a la Plaza de San Pedro, donde se han sentado a la mesa para comer la famosa pasta a la carbonara o una rica burrata, entre otros platos populares de la gastronomía italiana, como las pizzas, aunque algunos locales gastronómicos han subrayado que, pese a que algunos cardenales son clientes habituales, estos días no ha sido así ante la gran presencia de periodistas por la expectación que despierta la elección del nuevo pontífice.
Suscríbete a la newsletter de Gastro y te contamos las noticias en tu mail.