Gastronomía

Los 9 bares de tapas en Burgos donde probarás la mejor morcilla y otros sabores de otoño

Burgos
Apunta estos lugares para tapear por Burgos. Freepik
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Cualquier excusa es buena para escoger un lugar como destino y en el caso de Burgos, más todavía porque ya sea por su ambiente, su gastronomía o su cultura, será todo un acierto haberlo seleccionado. Aunque por encima de otros lugares a visitar una vez que estamos allí destaque su Catedral (imprescindible), hay muchos otros espacios por lo que conviene pasar, que hay que ver y disfrutar. 

Tan importante como caminar por la ciudad es hacerlo en las mejores condiciones, tomando los merecidos descansos y, por si acaso el día así amanece, encontrando refugio en momentos de lluvia o cuando las temperaturas no nos sean favorables. Por eso es una gran idea tener una lista de esos bares en los que podemos parar para recuperar fuerzas, tomar un vino, un vermú, un refresco o una botella de agua y, sobre todo, probar algunas de esas tapas que nos permitan admirar la gastronomía de la ciudad. No tiene pinta de ser complicado porque comer bien en Burgos es sencillo

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Bares de tapas en Burgos donde probarás la mejor morcilla

Todo el mundo tiene claro que una de las tapas estrella de Burgos es la morcilla, es la más conocida, pero no es lo único que puede hacernos caer rendidos ante la gastronomía burgalesa y recorrer estos bares de tapas es la mejor manera de comprobarlo por nosotros mismos:

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  1. Casa Pancho. Ideal para reservar una mesa y comer sin prisas disfrutando de su carta, pero también para tomar unas raciones de forma más distendida, apreciando recetas clásicas y producto de la zona. Puedes encontrar la morcilla tradicional, pedirla en revuelto o probar sus pimientos rellenos de morcilla. Tienen una gran variedad de raciones y tapas, por lo que si la morcilla no es lo tuyo, no hay problema. 
  2. Norte Gastrobar. Ingredientes de siempre, sí, pero con un toque diferente que hace imprescindible acudir a este lugar y no pedir su versión de La Cojonuda: un buñuelo japonés de guiso de morcilla con toques asiáticos, puré de piquillo, huevo de codorniz y alegría riojana. Tampoco es mala idea darle una oportunidad a sus croquetas de compango deconstruida o su burrata con chutney de mango.  
  3. La Favorita. Aquí puedes pedir la morcilla, la hacen asada y es típica de la zona, pero también es una buena idea darle una oportunidad a algunas de sus otras raciones, como las pencas rellenas en salsa verde, los canutillos de cecina con micuit, los huevos crema en sartén o las habitas salteadas con foie. Además, esta taberna urbana cuenta con una estupenda bodega.
  4. El Pez de San Lorenzo. Si buscas un lugar donde poder tomar un buen vermú, en este lugar lo preparan casero y además lo puedes acompañar de una buena selección de embutidos. Si esta no es tu tapa preferida, también son muy recomendables sus conservas. 
  5. Mesón Los Herreros. Se trata de uno de los lugares más conocidos de la ciudad y lo ha logrado gracias a su propuesta clásica, que invita a disfrutar de la gastronomía. Sus raciones y tapas tienen de todo para escoger, desde la típica morcilla acompañada de pimientos de piquillo al salteado de lechazo y verduras con salsa de miel y mostaza de Dijon.
  6. La Quinta del Monje. En la variedad está el gusto y tal vez por eso en este rincón puedes encontrar recetas tradicionales de la cocina burgalesa, como torreznos o pinchos de morcilla, pero también tatakis y yakisobas, más típicos de la cocina japonesa. Hay de todo donde escoger, también un poco de fusión con sus gyozas de morcilla. 
  7. El Rimbombín. La carta de este lugar es un reconocimiento a los productos típicos de Burgos, sus hortalizas y verduras, pero también sus quesos y sus carnes, sin olvidar, por supuesto, su morcilla. Entre sus pinchos y tapas, no dejes sin probar el ferrero de morcilla y puré de manzana o su mini hamburguesa de carrillera, dale una oportunidad a sus champiñones rellenos de jamón, sus mollejas de cordero o su sepia con alioli. 
  8. La Bodeguilla de Arrabal. Además de una amplia selección de bebidas, vermús, cervezas y vinos al gusto del consumidor, este rincón es ideal también para disfrutar de unas buenas raciones. Desde las clásicas gildas a los boquerones y los pinchos de tortilla, pasando por la oreja frita con salsa brava, la burrata con pesto y tomate rosa o la indispensable morcilla. 
  9. Casa Minuto. Justo al lado de la Catedral, en pleno corazón de Burgos, te espera este clásico de las tapas, embutidos y encurtidos, con tostas crujientes, pulgas recién horneadas y una cuidada selección de vinos para acompañarlo todo. Si te gusta el queso, su amplia oferta seguro que te ayuda a ser un poquito más feliz. 

Aprovecha tu estancia en Burgos para conocer la ciudad, pero también parte de su gastronomía a base de raciones y tapas, gracias a las cuales quedarás más que satisfecho.