Los acampados reciben una sanción de los residentes por haberse saltado las normas: entraron a sus habitaciones para ducharse

Las normas son claras. Los residentes disfrutan de habitaciones con baño incorporado mientras que los acampados tienen que dormir juntos y apañárselas como pueden para el aseo personal. Pero algunos como Marta, Tom, Sandra y Tony aprovecharon un renuncio de los residentes para darse una ducha.

Saltarse las normas tiene consecuencias. Pero esta vez no era el programa quien impondría la sanción sino los residentes. Lara Álvarez les dio a elegir entre tres opciones: pasar dos días sin calefacción ni agua caliente, vivir sin luz cuatro días ni aparatos eléctricos o quitarles la mitad de la compra.

Los residentes podrían haber fastidiado a los acampados, pero decidieron no perjudicar a sus compañeros "para que sirva de precedente". Así que finalmente todas las parejas de residentes votaron por quitarles la mitad de la compra teniendo en cuenta que volverán a hacer una compra la próxima semana.