La soledad de Miguel: la imagen de un enfermero llorando en el pasillo de un hospital conmueve a Instagram
Un enfermero publica una imagen llorando en un pasillo del hospital, visibilizando el desgaste emocional de su profesión y generando una ola de apoyo en redes.
Los enfermeros no pueden más y confiesan por qué abandonan España: "El trabajo es insostenible"
Málaga“Hoy lloré en el pasillo. Nadie se dio cuenta. Nadie me preguntó si estaba bien.” Así comienza el desgarrador testimonio de Miguel, un joven enfermero cuya fotografía llorando, sentado en el suelo de un hospital con una botella de agua en la mano, ha removido conciencias tras ser publicada por la cuenta de Instagram "Marbella se queja".
La imagen, que muestra al joven sanitario con el rostro visiblemente afectado, ha puesto palabras a una realidad que pocas veces se muestra, la de los profesionales que cuidan, acompañan y sostienen a otros en sus peores momentos.
En su mensaje, Miguel relata una jornada emocionalmente devastadora. En un solo día de trabajo, y según él mismo explica, "acompañó a dos pacientes en sus últimos momentos, abrazó a un padre que acababa de perder a su hijo, y lavó el cabello a un anciano que, antes de morir, le agradeció poder marcharse limpio". Pero a pesar de la dureza de la experiencia, lo que más le afectó fue que "ningún familiar acudió para despedirme", lamenta.
"No pido aplausos"
Unas declaraciones en las que se intuye el agotamiento físico y mental al que muchos están sometidos durante un día cualquiera. "“No pido aplausos. Solo pido que, si no es mucho pedir, me digan: ‘Hola, Miguel’, concluye, y el efecto ha sido tan rápido como emocionante.
La publicación ha recibido cientos de comentarios en pocos días: “Gracias por ser el familiar que nunca llega”, escribe una usuaria, “Miguel, no estás solo. Tu entrega y tu ternura valen más de lo que imaginas”, dice otra.
Incluso personas que han pasado por pérdidas recientes se han sumado al este homenaje improvisado: “Perdí a mi padre en cinco días y nunca olvidaré cómo lo trataron los enfermeros. Gracias, Miguel. Gracias por existir", escriben.
Mensajes que destacan la humanidad, la dignidad y la entrega silenciosa que representa su gesto. En tiempos en los que las agresiones a sanitarios y la saturación de los centros hospitalarios copan las páginas de actualidad, el testimonio de MIguel ha puesto cara a lo que hay detrás de cada cifra.
