El 92% de las playas y embalses de la costa del Mediterráneo podrían desaparecer antes del 2100
El estudio se centra en los efectos del cambio climático, especialmente en los vinculados al aumento del nivel del mar
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BarcelonaUn estudio alerta de la desaparición casi total de playas y embalses de la costa del Mediterráneo a lo largo de este siglo, de la que no se salvarían ni los embalses del Empordà ni los del Baix Ter. La investigación, elaborada por el centro tecnológico Eurecat junto con otras instituciones y universidades europeas, señala que en el peor de los casos, la desaparición podría llegar a ser devastadora con una pérdida del 92% de la extensión actual.
El estudio se centra en los efectos del cambio climático, especialmente en los vinculados al aumento del nivel del mar. Alertan que las pérdidas a gran escala solo pueden prevenirse mediante una mitigación efectiva del cambio climático.
El documento, dentro del marco del proyecto europeo REST-COAST, coordinado por el Laboratorio de Ingeniería Marítima de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC), propone un conjunto de medidas de mitigación del cambio climático que podrían contribuir a estabilizar las áreas de estos embalses, como la restauración de hábitats de estos ecosistemas.
El aumento del nivel del mar, una gran amenaza
Según explica en el diari de Girona el director del Centro en Resiliencia Climática, Carles Ibáñez, el nivel del mar podría subir "hasta un metro" antes de finales de siglo, por lo que en el estudio realizado se han evaluado los riesgos actuales y se han identificado los principales factores que determinarán los cambios en un futuro. Para ello, se ha utilizado una versión adaptada del Global Coastal Wetland Model (GCWM) y una base de datos diseñada para analizar los impactos físicos y socioeconómicos del aumento del nivel del mar en el Mediterráneo, que han permitido examinar diferentes escenarios de cambio climático.
Una de las principales soluciones que presenta el estudio es la migración hacia territorios interiores. El principal inconveniente está en encontrar espacios en la costa mediterránea que se puedan destinar a estos embalses. Eso sí, las previsiones mejoran cuando la aportación de sedimentos es mayor.