El acuario de A Coruña realiza dos microcirugías para salvar la vida a un caballito de mar

  • Tenía una malformación: un orificio por el que se le salían las vísceras

  • Ambas intervenciones se tuvieron que realizar con ayuda de una lupa

  • El animal evoluciona satisfactoriamente

El Aquarium Finisterrae de A Coruña ha realizado dos microcirugías para salvar la vida a un caballito de mar. Este ejemplar de 'Hippocampus abdominalis' presentaba una malformación de nacimiento: un orificio en el abdomen hacía que le saliesen por ahí las vísceras.

Esta lesión puede producirse en los ejemplares adultos, después de tener a sus crías, por el esfuerzo de expulsarlas. Sin embargo, en este caso, se trataba de un animal joven y el agujero era debido a una malformación de nacimiento. Tenía dos orificios en vez de uno. El caballito de mar nació hace casi un año en el propio acuario coruñés y los veterinarios lo tuvieron claro, había que operarlo para tratar de salvar su vida.

El ejemplar, de 8 centímetros fue intervenido quirúrgicamente para poder sobrevivir. En una primera intervención, se le introdujeron las vísceras en el interior y se cerró el hueco. Tras la cicatrización de la herida, en unas tres semanas, se realizó una segunda operación para retirar los puntos. Ambas intervenciones se tuvieron que realizar con ayuda de una lupa, debido al pequeño tamaño del pez.

Una vez que se comprobó que el caballito de mar estaba recuperado y se movía con normalidad, se devolvió al tanque con el resto de ejemplares de su especie. Era la operación más compleja a la que se había enfrentado, pero todo salió perfectamente. Continúa en cuarentena para que gane peso y recupere fuerzas, pero evoluciona satisfactoriamente. La operación fue el pasado mes de junio y el Aquarium de A Coruña ha recogido en un vídeo todo el proceso.

En busca de un nombre para el caballito

La historia de este superviviente ha calado entre los visitantes del museo. Es por quien más preguntan quienes acuden a la conocida como Casa de los Peces de A Coruña. Los veterinarios esperan que pronto el ejemplar pueda estar con el resto de sus compañeros en los tanques de la exposición. Pero mientras tanto, ya están buscando un nombre para él.

"Como todo el mundo nos está preguntando cómo se llama ya hemos pedido a la gente que nos mande ideas por las redes sociales", explican desde el Aquarium. Ya están recibiendo propuestas como Tripitas, Rocinante o Perdigón. En breve será bautizado con el nombre que reciba más apoyos.