El pueblo de Soria que fabrica pantallas con una impresora 3D casera para luchar contra el coronavirus

"Falta material" es la frase más repetida por el personal sanitario, y los políticos durante los últimos días. Mientras las administraciones esperan, discuten y gestionan el deseado reparto, son muchos los que arriman el hombro. No solo las grandes empresas, como Inditex, que ha cambiado la confección de camisetas por la de mascarillas.También ciudadanos anónimos aportan su granito de arena en esta crisis.

Uno de ellos es José Miguel, ingeniero industrial y profesor. Vive en Fuentelfresno, un pueblecito de Soria, apenas 40 habitantes repartidos en casas de piedra. Viendo la necesidad de elementos de protección, puso su impresora 3D a funcionar. "Tenemos un kilo de PLA (un tipo de plástico), cada pantalla pesa unos 25 gramos, podemos hacer cerca de cincuenta pantallas " nos cuenta .

Una hora para fabricar una pantalla

Tardan entre una y tres horas en hacer una pantalla. Y van destinadas sobre todo a enfermeros, y personal sanitario de hospitales y residencias de ancianos de Soria.

José Miguel pertenece a un grupo de 26 makers de la provincia de Soria, especialistas en el "hazlo tu mismo", o DIY en sus siglas en inglés. Se comunican y se organizan por whatsapp. Trabajan a demanda. Y le entregan el material que realizan a los bomberos o a la Guardia Civil que pasan a recogerlo.

"Sabemos que no son pantallas homologadas, pero menos es nada" admite al otro lado de la línea. "Si en Madrid no hay material, imagínate aquí" añade. A los de la España vaciada no hay que contarles qué es eso de estar aislados, ya lo saben.

Respiradores "made in home"

No son los únicos, hay quien va más allá. Como Julio, otro ingeniero industrial que se ha embarcado en fabricar respiradores médicos. Tarda algo más de hora y media y asegura que el coste es menos de un euro.

Coronavirus Makers

Josemi y Julio son sin saberlo parte de ese grupo de "Coronavirus Makers". Ingenieros, médicos, investigadores o "manitas", coordinados a través de Telegram, para fabricar en tiempo récord material y ponerlo a disposición de los sanitarios.

Unos de ellos son @ReesistenciaT. Unos investigadores asturianos que vieron venir la ola y se pusieron a trabajar en un respirador clínico impreso en 3D y que se puede realizar en unas horas.

El respirador funciona y se llama "Reespirator". Está basado en el sistema "Jackson Rees" y se está probando experimentalmente en Asturias y País Vasco. Solo les falta que Sanidad les de luz verde para que se puedan empezar a fabricarlos con ayuda de los "coronamakers" o de empresas que se presten.