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El león más famoso de Kenia dio su último suspiro el pasado 11 de junio. Scarface era popular por un buen motivo: ha vivido 14 años, lo cual lo convierte en el más longevo de la reserva natural Masái Mara. El mundo llora su muerte.
"Estamos desconsolados al anunciar que el legendario 'Scarface' falleció hoy por causas naturales en su amada casa de Mara", se lee en un comunicado del grupo Especies del Patrimonio Mundial (WHS, por sus siglas en inglés). Imágenes previas a su muerte hacían evidente su reciente pérdida de peso y empeoramiento, seguramente por el deterioro de la edad.
Scarface no era solo un veterano de la reserva, era además considerado un superviviente, un auténtico rey de la selva. Su rostro le ayudó a alimentar esa reputación y carisma, aunque la marca de su ojo cuenta una historia.
En 2012, Scarface (muchas veces comparado con el león villano de Disney) se metió una pelea que se cobró el párpado de su ojo derecho. Desde entonces, veterinarios han estado vigilando la herida abierta que preocupaba porque podía ser fuente de infecciones en cualquier momento. La cicatriz inspiró su apodo, traducido al español como 'caracortada'.
No ha tenido una vida fácil. También en una ocasión se enfrentó a la muerte tras ser atravesado por la lanza de un guerrero masai, en un acto de autodefensa de su ganado, que amenazaba Scarface. Tras ser rescatado por un grupo conservacionista, pronto se le vio cazando cebras nuevamente.
Pese a todo, ha tenido una vida larga y valiente. Los leones generalmente viven de 10 a 14 años. Los fotógrafos de vida salvaje se emocionaban al verlo en una oportunidad que pensaban que nunca llegaría. Su melena rebelde y su ojo arañado lo han convertido en uno de los rostros de las selvas que será más recordado de África.