Cómo eliminar las manchas difíciles de la ropa con productos caseros

Aceite, salsas, sangre seca, manchones de vino, cera endurecida en un tejido que no hay forma de retirar… todos nos hemos enfrentado a manchas más difíciles que otras a la hora de lavar la ropa, y a menudo hemos comprado productos carísimos que no han conseguido eliminarlas

La alternativa es clara: tirar de lo conocido y aprovechar para utilizar productos que tenemos en casa. Podemos crear quitamanchas caseros muy efectivos sin gastar un euro.

Te damos algunos tips para que elimines toda esa mancha que se te resiste de la ropa con remedios puramente caseros.

Siempre es mejor verificar las etiquetas de la ropa antes de aplicar cualquier método de limpieza. Si es posible, prueba el tratamiento en un área discreta de la prenda antes de tratar la mancha en cuestión. 

Hierba

Mezclamos un un cazo de detergente líquido con un puñado de sal hasta obtener una pasta espesa. Luego, la aplicamos sobre la mancha. Frotamos suavemente con un cepillo o un paño y nos aseguramos de cubrir toda la mancha. Enjuagamos con agua fría y lavamos la prenda como de costumbre. Si la mancha persiste, repetiremos el proceso antes de secar la prenda, ya que el calor puede hacer que se quede fija.

Vino tinto y café

No le damos suficiente valor al vinagre blanco, pero es uno de los quitamanchas caseros que mejor funcionan para descomponer los pigmentos de este tipo de manchas y ayudar a eliminarlas. Vierte un poco sobre la zona a tratar y luego, con un paño o una esponja, frota suavemente. Enjuaga bien la prenda con agua fría y métela en la lavadora. 

Aceite y salsas

Este quitamanchas casero sirve para todo tipo de manchas y puede prepararse con una mezcla de productos fáciles de encontrar en un supermercado. Sirve para lavar a mano o a máquina. Necesitaremos medio litro de agua, 2 cucharadas grandes de jabón en escamas y 100 ml de amoniaco. Realizaremos con cuidado la mezcla, abriendo las ventanas para ventilar el cuarto. Recién hecha, obtendremos una espuma, que introduciremos en un spray. Aplicaremos sobre la mancha. También podemos guardarla para más tarde. En ese caso cogerá progresivamente textura de gel.

Sangre

Otra de las ‘difíciles’. En poco de agua, mezclamos una parte de bicarbonato de sodio hasta formar una pasta. Deja que la pasta actúe durante unos minutos sobre la mancha. Luego, con un cepillo de dientes viejo o un paño, frota suavemente zona a tratar. Asegúrate de hacerlo con delicadeza para no dañar la tela. Enjuaga la prenda con agua fría y lava como de costumbre. Este método sirve tanto para manchas de sangre recientes como para las de sangre seca que llevan tiempo incrustadas en la ropa.

Tinta

Tritura una aspirina y mézclala con unas gotas de agua para crear una pasta. Aplica esta pasta sobre la mancha y déjala actuar durante la noche. Lava la prenda al día siguiente siguiendo tus rutinas habituales de lavado. La aspirina ayuda a romper los pigmentos de tinta y a eliminar la mancha de manera efectiva.

Cera

Una de las más molestas, por lo difícil de quitar que resulta si utilizamos un método incorrecto. A nuestro favor, el efecto del calor y un objeto que está en todas las casas: la plancha. Primero, coloca la prenda en el congelador para que la cera se endurezca. Una vez conseguido, raspa cuidadosamente la cera con una cuchara o un cuchillo sin filo. Coloca papel absorbente o una bolsa de papel en ambos lados de la mancha y pasa una plancha caliente sobre ella. La cera se derretirá y será absorbida por el papel.

Cercos de sudor

Las camisetas blancas no se libran de ese desagradable color amarillento conforme les damos uso. Para quitarlo, usaremos un blanqueador natural menos agresivo que la lejía: el limón. Frota un poco de zumo de limón sobre la zona manchada y tiende la prenda al sol durante varias horas. Después enjuaga bien la prenda con agua fría y lávala como lo haces normalmente. Ten en cuenta que este método puede decolorar tejidos de colores brillantes, así que úsalo con tiento.