Albert Hammond demuestra en Madrid que su leyenda sigue muy viva

AGENCIA EFE 14/05/2011 11:12

Una puesta en escena minimalista y sin alardes, pero efectiva, con una banda de cuatro músicos y dos coristas, ha permitido que Hammond y su música fueran los auténticos protagonistas de una intensa velada de casi hora y media de duración, donde se han combinado coplas, rock o rhythm and blues.

El repertorio ha empezado por "Ansiedad", y la inevitable emotividad de un concierto como éste no se ha hecho esperar, gracias a una pantalla en el fondo del escenario, que ha permitido a un joven Hammond combinarse con su versión madura, para recordar a su público que por él no pasan los años y su música permanece vigente.

En sus primeras palabras tras la canción de apertura, Hammond parecía nervioso, pero ha borrado de un plumazo esa falsísima impresión, rompiendo el hielo con un inesperado chiste que ha arrancado risas entre los presentes.

Y es que una de las tónicas del concierto ha sido la diversión, la cual el propio Hammond ha reivindicado varias veces. Porque, aunque gran parte de sus temas son melancólicos, el músico, a través de su dinamismo y calidez, se ha esforzado por hacer disfrutar a su público del mismo modo como él ha disfrutado en la pista.

Además de la diversión, tampoco han faltado otros sentimientos como la nostalgia o el cariño, con un conmovido Hammond que ha recordado su última y muy lejana actuación en Madrid -cuando apenas tenía 30 años- y ha dedicado canciones a su madre y a su esposa, ambas presentes en el patio de butacas.

El castellano ha estado muy presente en el primer tramo, con canciones como "Al otro lado del sol", "Ella" o "Las flechas del amor", que popularizara Karina en su época.

Después, ha llegado el primer tema en inglés, "Free Electric Band", con un ágil juego de luces que ha reforzado este himno, al que ha seguido "To all the girls", que Hammond compuso para Julio Iglesias y que ha supuesto una agradable sorpresa, ya que no está en su disco "Legend", el álbum que ha propiciado esta gira española.

Luego ha sido el turno de himnos como "Im a Train", "Espinita", "The air that i breath" o la potente "Nothing's gonna stop us now".

Otro de los momentos emocionantes lo ha otorgado la inesperada aparición de David Summers, el líder de Hombes G, que se ha subido al escenario para interpretar "Si me amaras".

Ello ha terminado de desatar las emociones de un público maduro que ha llenado las más de 1.000 butacas del teatro y que al principio se mostraba comedido, pero que poco a poco se ha soltado la melena, para corear las canciones, dar palmas e igualmente ponerse de pie desde sus butacas en el tramo final.

Ya con el concierto en su máximo esplendor, Hammond ha interpretado un popurrí de varios temas, incluyendo el que ha sido posiblemente la cumbre de la noche, "One moment in time", con un sonido espectacular.

Para cerrar su actuación, el músico ha regresado al castellano, con "Échame la culpa", invitando a sus motivados seguidores a cantarla, quienes lo han hecho con total entrega.

Así, Albert Hammond, compositor imprescindible de nuestra historia reciente, no ha defraudado y ha sabido estar a la altura de su leyenda, la cual, aún no está cerca de terminar.

Por Carlos Palencia