Los hermanos MacLean han conseguido atravesar remando el océano Pacífico desde Perú hasta Australia en 139 días
El propósito de esta hazaña es recaudar fondos para conseguir un sistema de agua potable en las zonas más pobres de Madagascar
Ewan, Jamie y Lachlan MacLean son tres hermanos que han conseguido una auténtica proeza. Los tres han remado desde Perú hasta Australia atravesando el océano Pacífico. Los hermanos MacLean han conseguido batir un récord con este desafío.
Precisamente, este sábado 30 de agosto han tocado tierra después de una hazaña muy laboriosa. 139 días y 14.400 kilómetros después los hermanos Maclean han llegado a Australia.
El desafío de récord al que se han enfrentado estos tres hermanos
Estos tres hermanos de Edimburgo, Ewan, Jamie y Lachlan MacLean, se embarcaron en una travesía ahora de récord e histórica para la navegación a remo. El objetivo: remar desde Perú hasta Australia para atravesar el océano Pacífico en menos de 160 días.
Partieron desde Lima el sábado 12 de abril a bordo de un bote de fibra de carbono, únicamente equipados con sus cámaras y 2.000 raciones de comida liofilizada.. Tras 14 horas diarias de remadas, este sábado 30 de agosto han pisado suelo australiano.
Los hermanos Ewan, Jamie y Lachlan MacLean han conseguido lograr la travesía más rápida jamás realizada, sin asistencia y sin escalas.
"Después de 139 días en el mar, estamos encantados de volver a tierra firme y reunirnos con nuestros familiares y amigos", publicaban ellos mismos en sus redes sociales nada más tocar tierra con sus propios pies.
No obstante, tanto Ewan, como Jamie y Lachlan reconocen las dificultades físicas y emocionales a las que han tenido que hacer frente durante estos días en el mar. "Hubo innumerables contratiempos que superar, algunos de los cuales nos dejaron perdidos, pero siempre nos apoyamos unos a otros", aclaran los hermanos.
El propósito de esta hazaña histórica: un sistema de agua potable en las zonas más pobres de Madagascar
Su motivación va más allá del anhelo de gloria y es que se han propuesto recaudar un millón de libras para instalar sistemas de agua potable en las zonas más pobres de Madagascar.
Durante casi cinco meses en el mar, los hermanos se han enfrentado a tormentas, mareos, deshidratación y un gran desgaste emocional. A pesar de todo, hoy al son de gaitas escocesas y arropados por familiares y seguidores han llegado a su destino.