Cuidado con el scalping, uno de los métodos de robo más utilizados en cajeros automáticos

El robo en cajeros automáticos ha evolucionado con el tiempo y los delincuentes han encontrado nuevas formas de vulnerar la seguridad de estos dispositivos. Entre las técnicas más utilizadas, el scalping se ha convertido en una amenaza creciente. Esta técnica consiste en la manipulación del dispensador de efectivo del cajero automático para interceptar el dinero que los clientes retiran sin que estos lo noten de inmediato.

¿Cómo funciona el scalping?

El scalping es un método sofisticado que implica la instalación de dispositivos en los cajeros automáticos para capturar el dinero dispensado. Los delincuentes colocan una trampa en la salida de efectivo del cajero, bloqueando el dinero mientras la transacción se completa con normalidad. El usuario cree que ha habido un error en la máquina y se retira sin su dinero, lo que deja el efectivo disponible para que los ladrones lo recojan después.

El modus operandi de los criminales suele incluir el uso de herramientas especializadas que permiten sujetar los billetes sin que se evidencie ninguna alteración en el funcionamiento del cajero. En algunos casos, utilizan mecanismos controlados a distancia que liberan el dinero una vez que el usuario se ha marchado.

El scalping lleva de cabeza a las entidades bancarias

Este tipo de fraude no solo afecta a los usuarios que ven comprometido su dinero, sino también a las entidades bancarias, que deben asumir las reclamaciones y mejorar constantemente sus sistemas de seguridad.

Los clientes pueden enfrentarse a la frustración de no recibir su dinero y al proceso de presentar quejas ante los bancos para recuperar sus fondos sí, pero también las instituciones financieras invierten en la detección y prevención de estos ataques para minimizar pérdidas.

Además de las pérdidas económicas, el scalping genera un impacto negativo en la percepción de seguridad en el uso de los cajeros automáticos. Muchas personas pueden volverse reacias a utilizar estos dispositivos, optando por alternativas digitales o reduciendo sus retiros en efectivo, lo que modifica los hábitos financieros y reduce la circulación de dinero físico.

Medidas de prevención y detección del scalping

En los últimos años, las entidades bancarias han implementado sistemas de monitoreo en tiempo real que permiten detectar transacciones sospechosas y alertar a los clientes en caso de anomalías.

También han reforzado los mecanismos de seguridad física de los cajeros automáticos, incorporando dispositivos antifraude que impiden la instalación de trampas en las ranuras de dispensación de efectivo.

Los usuarios pueden tomar precauciones para reducir el riesgo de ser víctimas de esta técnica delictiva. Antes de realizar un retiro de dinero, es recomendable inspeccionar visualmente el cajero en busca de cualquier objeto extraño o alteración en la ranura de dispensación. Si el efectivo no es entregado tras una transacción completada, es fundamental notificar de inmediato a la entidad bancaria y evitar alejarse sin antes reportar la incidencia.

El fraude en cajeros automáticos no es nuevo

El scalping es solo una de las múltiples técnicas que los delincuentes han desarrollado para vulnerar la seguridad de los cajeros automáticos. Con el avance de la tecnología, los fraudes financieros han evolucionado, obligando a los bancos a mantenerse un paso adelante en la implementación de medidas de protección. Como, por ejemplo, con la instalación de cámaras de vigilancia e incluso el uso de inteligencia artificial para detectar anomalías en las transacciones.

El futuro de la seguridad en cajeros automáticos también pasa por incluir tecnologías biométricas para autenticar las transacciones y eliminar la necesidad de tarjetas y códigos PIN, reduciendo así la exposición a fraudes.

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