Un estudio de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU, en contra de lo que establece la normativa de servicios de pago, que obliga a devolver el importe de lo cobrado de forma indebida al día siguiente de que se notifica un pago no autorizado.
Los cargos indebidos por tarjeta se producen en el uso fraudulento de tarjetas robadas o extraviadas, duplicadas o por el uso indebido de los datos. En España, según los últimos datos publicados por el Banco de España, en 2016 hubo 880.000 operaciones fraudulentas con tarjeta por importe de 56 millones de euros. Afortunadamente, se trata solo del 0,021% del total de operaciones con tarjeta, un porcentaje muy bajo que se debe a la aplicación de los sistemas de doble autenticación que han reforzado la seguridad de las tarjetas.
La OCU recuerda que la normativa protege a los consumidores afectados por el uso fraudulento de su tarjeta de crédito. En el caso de operaciones no autorizadas, tanto si se trata de un fallo de seguridad de la entidad, como si alguien ha accedido a los datos de su tarjeta de forma fraudulenta, la entidad debe devolver el importe de la operación como muy tarde al día hábil siguiente a la notificación por parte del usuario. Solo en el caso de robo o pérdida de la tarjeta, el usuario se hará cargo como máximo de 50 euros si la tarjeta se utiliza antes de que el banco reciba la comunicación del robo o la pérdida.
Muchas entidades establecen una serie de requisitos adicionales (formularios estandarizados, obligación de denuncia policial o petición de la tarjeta original) que retrasan el reintegro de las cantidades pagadas de forma fraudulenta. La organización considera que la devolución al consumidor siempre debe ser inmediata, con independencia de que, posteriormente, la entidad realice dichos trámites.
Según la información facilitada por las entidades para la realización del estudio, solo el Banco de Sabadell no establece condiciones adicionales a las que fija la norma. Además, Abanca, Bankia, Openbank, Santander y Caixabank se conceden un plazo superior al que establece la normativa. Ante esta situación, la OCU va a pedir al Banco de España que inspeccione las condiciones y plazos que aplican las entidades financieras en las reclamaciones por el uso fraudulento de tarjetas.
Para prevenir fraudes con las tarjetas, la OCU hace a los consumidores las siguientes recomendaciones:
La Organización de Consumidores y Usuarios indica los pasos a seguir en caso de uso fraudulento en tarjeta de crédito:
En caso de que seamos víctimas de un uso fraudulento, los consumidores estamos protegidos: la Ley de Servicios de Pago
En los supuestos de copia o duplicado de la tarjeta, el banco le deberá devolver de inmediato el importe total de la operación no autorizada, sin que el usuario deba responsabilizarse de ninguna cantidad.
En los casos en que el fraude se produzca como consecuencia del robo o pérdida de tarjeta, el usuario es responsable por el uso fraudulento antes de la comunicación del robo o la pérdida, pero por una cuantía limitada a un máximo de 50 euros salvo culpa o negligencia grave.