¿De qué manera afecta la tecnología a los trastornos emocionales de los niños?
El acceso a la tecnología que tienen los niños y adolescentes ha hecho que se transforme la manera que tienen de comunicarse o entretenerse
Una correcta supervisión del uso que hacen de la tecnología puede hacer que se evite que los más jóvenes sufran ansiedad o trastornos del sueño
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MadridEn los últimos años, la tecnología se ha convertido en una parte esencial de la vida diaria, sobre todo para los niños y adolescentes. Los más jóvenes están más conectados que nunca gracias a los dispositivos móviles y el acceso a redes sociales. No obstante, ese aumento en el uso de la tecnología también ha provocado preocupaciones sobre el impacto que pueden tener en la salud mental de las nuevas generaciones.
Distintos estudios han explorado la relación entre el uso de la tecnología y la aparición de trastornos emocionales en niños y adolescentes, aportando luz sobre los posibles riesgos y beneficios que se asocia al uso de la tecnología desde temprana edad.
Según datos recientes, los adolescentes suelen pasar una media de 3,5 horas al día en redes sociales. Este tiempo incluye también actividades como navegar por internet, jugar a videojuegos o el uso de las redes sociales. El fácil acceso a la tecnología ha hecho que la manera que tienen los niños y adolescentes de comunicarse, divertirse o entretenerse se haya transformado por completo. Es cierto que la tecnología también ofrece muchas ventajas como puede ser el acceso a la información o la posibilidad de mantener conexiones sociales, aunque es por esto que puede plantear auténticos desafíos para el bienestar emocional.
¿Qué trastornos emocionales están asociados al uso de la tecnología?
Ansiedad y depresión
Diversos estudios han encontrado una conexión entre el uso excesivo de las redes sociales y el aumento de síntomas de ansiedad y depresión en los adolescentes. Un informe del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU. ha señalado que los niños o adolescentes que pasan más de tres horas al día en redes sociales tienen el doble de riesgo de experimentar problemas de salud mental como pueden ser síntomas depresivos y ansiosos.
Además, la constante exposición a imágenes idealizadas y la comparación social pueden contribuir a que se sientan insuficientes y que derive a una baja autoestima. Por otro lado, la presión por mantener una presencia online activa y, sumado a la necesidad de recibir validación externa a través de los “Me gusta” y comentarios pueden provocar que la ansiedad o depresión aumente.
Trastornos del sueño
Está demostrado que el uso de dispositivos electrónicos antes de dormir está asociado con alteraciones en la calidad del sueño. La luz azul que emiten las pantallas puede interferir con la producción de melatonina, la hormona relacionada con el sueño. Esta falta de sueño puede también acentuar problemas de salud mental como la irritabilidad, la dificultad para concentrarse o la predisposición a padecer trastornos emocionales.
Estrés digital y presión social
Como hemos mencionado, los adolescentes tienen la necesidad de tener una constante presencia en redes sociales, de estar continuamente disponibles. Esto puede convertirse en una fuente de estrés para ellos. Un estudio publicado en “Frontiers in Digital Health” ha revelado que usar constantemente estas plataformas puede provocar estrés digital, lo que genera sentimientos de tristeza y frustración cuando los amigos no están disponibles, algo que puede provocar conflictos o malentendidos entre ellos.
¿Cuáles son los mecanismos que hay detrás del impacto de la tecnología en niños y adolescentes?
Liberación de dopamina y adicción
Cuando se interactúa con dispositivos electrónicos, sobre todo en el caso de las redes sociales, se puede estimular la liberación de dopamina en el cerebro. Esta es una sustancia química que está asociada con la sensación de placer y recompensa. La liberación de esta hormona puede conducir a comportamientos adictivos y provocar que los niños y adolescentes quieran buscar constantemente esta recompensa inmediata que les dan estas plataformas.
Ciberacoso y comparaciones sociales
El ciberacoso se ha convertido en una preocupación que aumenta en el mundo digital. Los adolescentes pueden convertirse en víctimas de acoso online. Esto les puede provocar ansiedad, depresión e incluso que comiencen a tener pensamientos suicidas en casos más extremos.
Por otro lado, las redes sociales continuamente están fomentando comparaciones. Estas pueden ser físicas o aspiracionales, pero en cualquier caso, los niños o adolescentes pueden sentirse inferiores al comparar sus vidas con las de otros, sin siquiera plantearse que lo que ven es una mínima parte de la realidad y que, incluso, puede estar modificada o alterada enseñando solo aquellas partes positivas o idealizadas.
Cómo se puede usar de manera saludable la tecnología
Para poder minimizar los efectos negativos que la tecnología puede provocar en la salud mental de los niños y adolescentes, se recomienda seguir las siguientes medidas:
- Establecer siempre límites de tiempo para ellos para asegurarse de que no pasan demasiado tiempo con los dispositivos móviles, y haciendo especial hincapié en el momento antes de acostarse para que se garantice un descanso adecuado.
- Fomentar la participación en actividades físicas, buscar hobbies que les gusten y que pasen tiempo en familia para poder equilibrar el tiempo que pasan online.
- Proporcionar una educación adecuada a los niños y adolescentes sobre el uso responsable de la tecnología y cómo evitar una sobreexposición a contenido que puede hacerles daño.
- Los padres deben supervisar activamente lo que sus hijos ven en sus dispositivos móviles, así como, se recomienda mantener una conversación abierta con los hijos sobre qué hacen online y darles apoyo en caso de que se enfrenten a alguna situación negativa en internet.