La agencia meteorológica la ha definido como una "profunda y amplia borrasca". Gisele, cuyo nacimiento está precisamente en las costas de Canadá, ha ido cogiendo fuerza los últimos días gracias a las altas temperaturas que está registrando el Atlántico. Este calor, combustible para el fenómeno, ha permitido que la borrasca se traslade de un punto del océano Atlántico a otro y llegue el miércoles muy probablemente al oeste de las Islas Británicas, el punto de mayor acercamiento a nuestras costas.
Los efectos que se prevén serán "precipitaciones abundantes y fuertes vientos en amplias zonas de la Península", así como "mala mar en áreas costeras de Galicia", señala el comunicado. La mayor cantidad de agua se espera que caiga en el oeste y sur de Galicia, con acumulaciones que rondarían los 40 litros por metro cuadrado, aunque se producirán precipitaciones en general en áreas próximas a las laderas sur de las cordilleras.
En cuanto a cuándo podremos ver los primeros efectos de Gisele, la agencia meteorológica señala que será el miércoles, con lluvias abundantes. Desde ahí, "se irán extendiendo hacia el oeste a lo largo del día". Estas serán "continuas y generalizadas con el frente, y más dispersas tras su paso", si bien "podrían ser persistentes en Galicia y en áreas de montaña".
El viento, el gran protagonista en España
Lo que realmente producirá Gisele en la mayor parte del país será viento, y del intenso. Será "inicialmente de componente sur, girando a suroeste", detalla la agencia meteorológica.
Podrá alcanzar rachas muy fuertes, en torno a los 80 km/h de forma generalizada en amplias zonas, y superar los 100 km/h en zonas altas y en el oeste de Galicia. "Será menos intenso en el valle del Ebro y en general en el extremo oriental peninsular", puntualiza la AEMET.
Mar embravecido y temperaturas en descenso generalizado
El mar también se encontrará durante varios días especialmente virulento. Tanto en las zonas costeras como en alta mar, se registrará viento del oeste o suroeste de fuerza 8 o 9, con olas que podrían alcanzar los 5 y 6 metros de altura.
Por otra parte, se espera que las temperaturas experimenten un descenso bastante acusado en prácticamente todo el país. La razón es que, al contrario que Félix, que traía aire caliente, Gisele viene acompañada de un frente frío que desplomará las temperaturas, especialmente en el interior peninsular, norte de Galicia, Pirineos y sureste peninsular, y menos en el suroeste.
Junto a esto, la cota de nieve descenderá a lo largo de la semana, terminando por situarse en torno a los 1.000 metros de altura en prácticamente todos los sistemas montañosos.
El miércoles, el día más fuerte
La agencia meteorológica ha concluido la nota señalando que precisamente el miércoles, el día que más cerca estará Gisele de nosotros, también será el más intenso. Aun así, no se descarta la posibilidad de que a lo largo de esta semana se produzcan otros "nuevos episodios de precipitación y viento asociados a nuevos frentes y borrascas, con cotas de nieve más bajas".