'Juego de Tronos' meteo: los cinco anticiclones que rigen el planeta y hacen que tú pases frío o calor

Marcos Fernández 27/05/2018 10:39

Anticiclón de las Azores

Recibe su nombre del archipiélago portugués donde se instala y campa a sus anchas hasta llegar a nosotros. Es el primero de la lista porque ya todos lo conocemos y siempre llega puntual a su cita. A partir de la primavera y durante todo el verano se queda con nosotros. Aleja las borrascas de nuestro país y las desvía a latitudes mucho más al norte: Reino Unido, Escandinavia y, en general, el norte de Europa. También puede visitarnos en otoño e invierno, pero es menos habitual. Eso sí, cuando lo hace nos regala días perfectos de sol y temperaturas altas.

¿Qué pasaría si no lo tuviéramos con nosotros? Si no fuera gracias a él, nuestro tiempo sería muy diferente… tan diferente como el que hemos sufrido durante estos últimos meses: entrada de borrascas sucesivas y lluvias constantes. Sin embargo, es tan poderoso que cuando asciende de latitud hace de pantalla frente a las costas de Portugal y solo las borrascas más potentes son capaces de retirarlo.

*Imagen: Anticiclón de las Azores

Anticiclón de las Bermudas

En el misterioso y enigmático archipiélago, y junto al de las Azores, tenemos a otro gran titán que asegura tiempo soleado al paraíso de las Bermudas. Nada pasa por casualidad y es gracias a él que las Islas Bermudas son uno de los destinos turísticos más deseados de América.

También, como nuestro anticiclón, es cálido. Y esto quiere decir que su corazón es caliente, es decir, que su centro es fuerte y poderoso por lo que es muy difícil romperlo.

En realidad, como el de las Azores, el de las Bermudas forma parte de un potente cinturón de anticiclones, una barrera que abona al buen tiempo: sol y temperaturas siempre suaves.

De hecho, para romper este potente anticiclón situado al otro lado del Atlántico se necesitan perturbaciones potentes, como la presencia y paso de huracanes que luego bordean la costa de EEUU generando numerosos destrozos. Solo en estas situaciones, el de las Bermudas cede terreno.

*Imagen: Anticiclón de las Bermudas

Anticiclón de Hawái

Ya lo cantaba Ana Torroja cuando cantaba integrada en Mecano: "Hawái Bombay son dos paraísos…" Y tenía mucha razón. Con conocimiento de causa o no es totalmente cierto. Uno de los mayores paraísos naturales verdes de la Tierra se encuentra en este estado de EEUU.

El archipiélago hawaiano se ubica justo en el centro de un anticiclón tan potente como el de las Azores, que asegura (gracias a su latitud) temperaturas estables durante todo el año y tiempo tranquilo y soleado. Solo gracias a la humedad del mar y las precipitaciones temporales se mantiene tan sumamente verde y salvaje.

Su régimen de vientos, gracias también al anticiclón, favorece que sea un paraíso para la práctica del sur entre los surferos de todo el mundo.

*Imagen: Anticiclón de Hawái

Anticiclón del Pacífico Sur

Otra potente masa de aire cálido impone su imperio de tiempo seco y soleado frente a las costas suramericanas de Perú, Bolivia y Chile. Este reinado del sol se debe, como en los casos anteriores, a su potente centro de acción infranqueable.

Impide que las lluvias puedan romper en algún momento la barrera de las altas presiones. Como en el caso de las Bermudas, es necesario que borrascas potentes desplacen este anticiclón para que, de forma periódica, la lluvia sea protagonista.

Sin embargo, aquí, el fenómeno del Niño y la Niña está alterando los patrones del clima y es un factor más contra el que combate el Anticiclón del Pacífico Sur.

*Imagen: Anticiclón del Pacífico Sur

Anticiclón de Siberia y Canadá

Ambos son propios de extensas áreas de tierra firme, grandes llanuras donde en invierno se imponen bajísimas temperaturas. No siempre los cielos despejados están asociados a calorcito. De hecho, a veces, el de Siberia nos envía vientos gélidos procedentes de aquella latitud y nos deja congelados.

Esto se debe a su interacción con otros centros de acción (anticiclones o borrascas) que generan pasillos de miles de kilómetros canalizando todo el aire frío y arrojándolo sobre la Península.

La potencia de estos anticiclones suele generar nieblas persitentes que agudizan la sensación de frío gélido con temperaturas muy por debajo de los cero grados. En ocasiones, cuando el de las Azores nos visita también hace de las suyas generando el mismo efecto de la niebla.

No siempre anticiclón es sinónimo de tiempazo.

*Imagen: Aniciclón de Siberia