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La reciente borrasca Alex ha provocado en puntos de Francia un temporal histórico. Las inundaciones de este año “no tienen precedentes”, ha dicho la Organización Meteorológica Mundial (OMM), y se han producido además en dos ocasiones en 2020, cuando lo normal es una vez por siglo.
Meteo France (la agencia meteorológica francesa) los llama episodios mediterráneos, y el otoño es tradicionalmente la temporada alta por la calidez de las aguas mediterráneas.
La tormenta Alex, que azotó el sur del Reino Unido y Bretaña en el noroeste de Francia, desencadenó el evento. Los patrones climáticos asociados con este sistema de baja presión se encontraron sobre los Alpes con aire cálido que venía del sur, alimentándose del agua cálida del Mediterráneo que luego se enfrió y formó una celda persistente de lluvia tormentosa, cuenta en nota de prensa la OMM.
Hasta 500 litros por metro cuadrado de lluvia, o el equivalente a 3 meses, cayeron en las zonas más afectadas del departamento de Alpes-Martimes, según Météo-France. El diluvio arrasó casas e infraestructuras, aisló a comunidades enteras y provocó una serie de víctimas. La provincia de Piamonte, en el norte de Italia, también se vio gravemente afectada. Las imágenes de satélite capturaron la extensión de los escombros y el lodo que fluyeron hacia el océano.
La cantidad de lluvia asociada con este episodio fue totalmente excepcional. Estos son eventos de lluvia que normalmente solo ocurrirían una vez por siglo. Es la segunda vez este año que cae una cantidad de 500 l/m(2) (Gard el 19 de septiembre), según Véronique Ducrocq, meteoróloga de Météo-France y coordinadora de un HyMeX, un proyecto relacionado con la OMM para mejorar la modelización del ciclo del agua mediterráneo.
"Es histórico. Nunca hemos visto 2 eventos de este tipo en un año", dijo.
El análisis de los episodios de precipitaciones extremas en los últimos años muestra que ha indicado una intensificación de las lluvias intensas y un aumento en la frecuencia de episodios mediterráneos fuertes, con más de 200 l/m(2) de precipitaciones en 24 horas.
La investigación al respecto continúa ya que el modelado de eventos de lluvia extrema sigue siendo un desafío importante, concluye el comunicado de la OMM.