Después de tanto anticiclón podemos empezar a hablar de borrascas atlánticas que ya sí nos afectan. Mientras la tormenta nombrada Freya por el servicio meteorológico británico se aleja hacia Reino Unido, una nueva borrasca se acerca nuevamente en la misma dirección. El resultado: lluvias copiosas en el noroeste y, por fin, algunas nevadas.
A partir del miércoles los esquiadores podrán al fin disfrutar de la nieve porque un nuevo frente, asociado a la borrasca que se dirige al norte de Europa, nos va a dejar algunos copos. Donde más espesor se espera es en las zonas montañosas de la mitad norte peninsular, especialmente en Pirineos y la Cordillera Cantábrica.
Las nevadas más copiosas llegarán durante el jueves, cuando la cota de nieve bajará a alrededor de los 1.000 metros de altura en el noroeste y nordeste. Nevará en la Cordillera Cantábrica, los Montes de León, Pirineos, Sistema Central, Sistema Ibérico y, en menor medida, en el Sistema Bético. En Ávila y León podría activarse el aviso de la Agencia Estatal de Meteorología por acumulaciones de nieve de unos 10 centímetros en un día, entre el miércoles y el jueves.
Como se observa en los siguientes mapas, progresivamente la nieve irá a menos por el paso rápido del frente. Se prevé que para el viernes, al final del episodio, se hayan acumulado hasta 15 centímetros de nieve en las regiones, en color rosa. Se librarán de las nevadas tanto el litoral mediterráneo como las zonas costeras del Cantábrico, donde los vientos del sur siguen arreciando esta semana.
*Imagen: Acumulación de nieve entre el lunes y el viernes, 8 de marzo / Tropical Tidbits
En la recta final de la semana el anticiclón podría devolvernos el ascenso de las temperaturas, que descendían mucho al principio de la semana. Entre el lunes y el jueves las temperaturas máximas se desploman en algunas regiones más de 10ºC. En cuanto a las mínimas, los termómetros en muchas zonas de la mitad norte peninsular marcarán ya valores bajo cero.
Pero con el ascenso de las temperaturas del viernes nos despediremos no solo del frío sino también de la nieve. Para el fin de semana podríamos ver todavía algo de blanco en Pirineos y en la Cordillera Cantábrica, aunque muy tímidamente.