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Esta semana está siendo de estreno de fase en casi toda España. Unos pasan a la fase 1 y, otros, los más afortunados, a la 2. En esta última reabren parques nacionales, se retiran los horarios para los paseos y, en las zonas de costa, se permite el acceso a las playas. Aunque el espacio entre bañistas ha crecido con respecto a otros veranos, lo cierto es que el ambiente el primer día de chapuzón se ha disfrutado como nunca.
Otra cosa no, pero ganas de playa con el calorazo que está haciendo, había. En general se han respetado las medidas de seguridad y no se han lamentado incidentes ni aglomeraciones.
Un mínimo de dos metros de distancia, aforo controlado… "Dicen que a lo mejor ponen un semáforo", comenta una mujer. Es una de las propuestas para no rebasar el número de personas que pueden echarse en la arena de golpe. Son medidas que iremos descubriendo a lo largo del verano y que los ayuntamientos de cada región decidirán si lo consideran oportuno. Es decir, si se va de las manos.
El resto de la semana lo más seguro es que se repita la misma imagen. Las previsiones apuntan a un resto de la semana caluroso, con temperaturas que, en general, serán más altas de lo normal hasta el domingo. Se alcanzarán o rozarán los 30ºC en la mitad del país, y las noches serán parecidas a las de verano: llevaderas, de tirar de chaqueta solo en según qué zonas.
En Canarias, donde en este comienzo de semana aprieta el calor, irá ligeramente a menos, aunque se seguirá rondando la marca de los 30ºC, y en las playas del Mediterráneo el ambiente no será de tanto bochorno como en Huelva, por ejemplo, pero será muy agradable. La excepción serán algunas localidades de costa del norte, de Galicia y de Cádiz y la Costa del Sol. Por allí el viento soplará en algunos momentos demasiado para echarse a tomar el sol. Además, no se descartan las lluvias vespertinas en el norte ningún día.
En cuanto al centro, en general todavía nos quedamos en la fase 1. Las zonas en fase 2 tendrán más libertad que, a falta de playa, podrá aprovecharse en parques y otras zonas al aire libre como las terrazas, aunque con múltiples medidas, en todos los casos, para garantizar la seguridad.