Las protestas contra el cambio climático en Londres dejan más de 500 detenidos

  • Reprimen a los activistas medioambientales de Extinction Rebellion

Las protestas contra el cambio climático han sido reprimidas en todo el mundo. En Reino Unido han sido detenidos 531 personas por movilizarse en las calles por la emergencia del clima, esa que desoyen los políticos y las multinacionales. El Gobierno de Boris Johnson ha restringido las zonas para manifestarse e indican " ir a la plaza de Trafalgar y reunirse únicamente en las zonas colindantes peatonalizadas".

La Policía Metropolitana de Londres ha explicado que estas limitaciones para protestar busca "para prevenir que las manifestaciones afecten seriamente a la comunidad" después de que el tráfico se viera golpeado en el centro de la capital durante el primer día de protestas.

"Todos aquellos que no cumplan con esto podrán ser detenidos e imputados", ha informado la Policía en un comunicado. El número de detenidos era de 212 el lunes, mientras que el martes la cifra alcanza las 531 personas.

Downing Street ha subrayado que el Gobierno espera que la Policía "tome medidas fuertes contra los manifestantes que están creando serios problemas en las vidas ajenas".

Protestas en 60 ciudades del mundo

Cientos de personas han sido detenidas esta semana en ciudades de todo el mundo durante el arranque de una campaña de resistencia pasiva para protestar por la falta de respuesta de los gobiernos ante lo que consideran una emergencia climática. Las protestas estaban convocadas en 60 ciudades como Londres, Sídney, Ámsterdam, Berlín o Madrid.

"Estamos aquí porque el Gobierno no está haciendo lo suficiente ante la emergencia climática. Solo tenemos un planeta, así que estamos aquí para defenderlo", ha afirmado una de las asistentes, Lizzy Mansfield.

Las movilizaciones planetarias forman parte de una campaña de dos semanas organizadas a nivel mundial por Extinction Rebellion, una asociación creada en Reino Unido que ya logró bloquear el centro de Londres durante 11 días el pasado mes de abril.

El objetivo es movilizar a activistas de todo el mundo y exigir la reducción a cero de las emisiones de gases de efecto invernadero para 2025 para evitar así la pérdida de biodiversidad.