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A las tres de la tarde del sábado los termómetros almerienses marcaban alrededor de 30ºC. Una hora más tarde, a las cuatro, marcaban más de 40ºC. La estación de Almería-Aeropuerto registró una oscilación de más de 10ºC que se produjo en cuestión de minutos por lo que se conoce como 'reventón cálido'. ¿Cómo es posible que se produjese este subidón? Te contamos en qué consiste este fenómeno que la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) califica de singular.
A las tres de la tarde todo era normal: viento de apenas 50 km/hora, humedad relativa del 70% y poco más de 30ºC de temperatura. Pasaron los minutos y, repentinamente, el viento se aceleró hasta más de 70 km/hora. Además, la humedad relativa se desplomó a más de la mitad y la estación de Almería-Aeropuerto registró una temperatura que no se alcanzaba desde el 30 de julio de 1981: 41,1ºC. Se trata del valor más alto alcanzado desde entonces y duró una media hora. Después, todo volvió a su ser.
*Imagen: Temperatura máxima registrada el 30 de julio de 1981 en Almería-Aeropuerto / Aemet OpenData
La Aemet lo define de la siguiente manera: "consiste en una fuerte corriente descendente convectiva, originada a menudo en el seno de una nube de tormenta, que ocasiona vientos destructores".
*Imagen: Ilustración de la formación de un reventón térmico / Fernando Caracena / Aemet OpenData
La corriente que baja de una capa más elevada atraviesa en su camino descendiente, vertical, una capa de aire relativamente cálida y seca y se va acelerando. A continuación, atraviesa otra cerca de la superficie algo más fría y húmeda, suficientemente delgada para no impedir que siga su camino al 'suelo'. Resultado: el aire se calienta repentina e intensamente, seca el ambiente y dispara el termómetro a su llegada a la superficie. Es decir, el viento cambió de dirección y se aceleró al tiempo que arrastró de capas más altas rachas intensas y calor atípico.
Las consecuencias de este fenómeno también conocido como 'downburst' son, como se puede observar en los siguientes gráficos, rachas de viento fuertes, baja humedad relativa y calor repentinos.
En este caso, al cabo de media hora las temperaturas se normalizaron de golpe, el viento se ralentizó y la humedad las 18:00 horas era del 80%. ¡Como si nada hubiese pasado!