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El día más frío en 37 años ha provocado lo que se conoce como 'humo del mar', una espesa niebla que ha envuelto la ciudad de Sídney. Las imágenes son de película. Apenas pueden diferenciarse los edificios de su distrito comercial, y en la carretera se han tenido que emitir alertas por el riesgo de accidentes que supone la escasa visibilidad. ¿Cómo se ha formado este curioso fenómeno?
En los últimos días, las máquinas quitanieves no han parado en los estados australianos de Nueva Gales del Sur y Queensland, donde el aire frío se ha adentrado desde el sur, con procedencia antártica.
El invierno está a punto de empezar en el Hemisferio sur y desde luego lo va a hacer por la puerta grande. Si bien es normal que haga frío, las temperaturas que se han registrado en la primera quincena de junio son excepcionales, tanto que no se producían hacía varias décadas en ciudades como Sídney.
Ese frío es lo que ha provocado la formación del denso ‘humo de mar’. A medida que una masa de aire gélido sobrevolaba el puerto de Sídney, el famoso Harbour Bridge desaparecía entre el vapor que emanaba del agua, algo parecido a lo que pasa cuando sacas el café del microondas y sale vapor, según ha explicado el meteorólogo de ‘AccuWeather’ Dave Samuhel.
En los suburbios del oeste de la ciudad fue imposible ver unos metros más allá la mañana del jueves, ya que los vientos arrastraron la niebla tierra adentro, y en el mar fueron cancelados algunos ferris, mientras que los que ya se encontraban navegando se desplazaron a un ritmo muy lento.
Por suerte para los más frioleros, la masa de aire heladora que sobrevoló el este de Australia se alejó al poco tiempo, y poco a poco un clima más templado se va imponiendo en la región. Un cambio muy llamativo, dado que de los valores bajo cero de hace unas jornadas pasan esta semana a registrar entre 15 y 20 grados en Nueva Gales del Sur.