Javier Iglesias Peláez y el FRAP: un jubilado atrapado por su pasado

  • El activismo antifranquista del padre de Pablo Iglesias resurge como arma arrojadiza contra el vicepresidente

La bronca política del momento se centra en la figura de Pablo Iglesias Peláez. Es el padre del vicepresidente segundo del Gobierno. Su militancia política a finales del franquismo le ha dado pie a la diputada del PP, Cayetana Álvarez de Toledo, a lanzar un duro ataque contra su hijo, Pablo Iglesias Turrión, al que ha acusado de pertenecer a la aristocracia “del crimen político” por ser “hijo de un terrorista”.

A día de hoy, Javier Iglesias Peláez, nacido en Madrid en 1954, es un vecino de Zamora jubilado. Licenciado en Derecho por la Complutense y en Historia Contemporánea por la Universidad de Zaragoza, el grueso de su currículum son los años que ejerció de Inspector y Delegado de Trabajo en Soria, Guipúzcoa, Zamora, Almería y Madrid. También ha sido profesor.

Su última actividad política ha sido como aspirante a una concejalía en la listas de Podemos. Antes del nacimiento de esta formación, se había presentado como candidato testimonial en varias elecciones generales y municipales: siempre por Izquierda Unida.

Su hijo, Pablo, vicepresidente, lo tiene claro. De terrorista, nada: un "combatiente" que hizo "frente sin miedo a la dictadura".

¿Es un terrorista?

La grave acusación que ha lanzado contra él Cayetana Álvarez de Toledo se remonta a casi 50 años atrás. A su época de activismo político en el final del franquismo, y se aferra como aval para demostrarlo a una frase del propio Pablo Iglesias. En un artículo de 2012 a raíz de la muerte de Santiago Carrillo, Iglesias escribió: "Créanme que siendo hijo de un militante del FRAP y habiendo militado donde milité, tiene su mérito admirar a Carrillo". El PP lo ha difundido como prueba de la vinculación de Iglesias Peláez con el llamado Frente Revolucionario Antifascista y Patriota. El FRAP perpetró diversos actos terroristas del 73 al 75, entre ellos tres asesinatos, y se disolvió en 1978.

La razón, sin embargo, de que el padre de Iglesias pasara por la cárcel en el 73 no está vinculada a ninguna de las actividades de ese autodenominado frente. ”Francisco Javier Iglesias fue detenido en 1973 y encarcelado en Carabanchel por repartir propaganda del 1 de Mayo”, ha precisado Podemos en su cuenta de tuiter. La formación que lidera su hijo defiende que “se jugó el tipo por las libertades que hoy disfrutamos”. Y añade: "Para la dictadura era un criminal y para la marquesa Cayetana Álvarez de Toledo, en 2020, también".

No es la primera vez que al padre de Iglesias le acusan de terrorismo. Antes lo hizo el periodista y hoy eurodiputado de Vox Herman Tertsch, y tuvo que pagar por ello. En su caso no fue en la tribuna del Congreso, como ahora ha hecho Álvarez de Toledo, sino en las redes sociales. Esto fue lo que escribió: “Del nombre de este policía tampoco se acuerda nadie. José Antonio Fernández Gutiérrez asesinado por el FRAP, grupo terrorista comunista, el 1 de mayo de 1973. Entre los miembros detenidos después estuvo el padre de Pablo Iglesias. Como llegó la amnistía nunca fue acusado nadie”.

Cuando supo que en el momento del atentado al que hacía mención el Iglesias Pélaez estaba en la cárcel por lo de la propaganda ilegal, Tertsch reformuló su acusación. “Las decisiones sobre matar o no matar policías se toman antes. Además, yo no he dicho que el padre de Iglesias fuera uno de los autores materiales del asesinato de aquel policía de 21 años. Sino que no ayudó a esclarecerlo. Nunca fue aclarado ese crimen porque se dio la amnistía”.

En la cárcel por repartir propaganda

Aún así, el juez de Zamora que vio el caso condenó al periodista y político Tersch a pagar 15.000 euros. La Justicia entendió que había incurrido en un deliro de “intromisión ilegítima”. Que había una “vulneración del derecho al honor”, a la intimidad y a la propia imagen de Javier Iglesias Peláez, que se enfrenta ahora a una situación similar. Su hijo, también desde la tribuna del Congreso, ha anunciado que le aconsejará tomar las medidas legales oportunas contra quién le ha lanzado la nueva acusación.

Curiosidades de la política, la defensa de Iglesias Peláez cuando fue procesado por el reparto de propaganda corrió a cargo de un joven entonces José Bono. Militante del PSP y abogado recién licenciado. El padre de Iglesias mantuvo un blog abierto en 2008 y 2016 en el que iba dejando sus impresiones políticas y algunas vivencias. Entre otras cosas, en una de las entradas recordaba cómo durante su estancia en la cárcel le fueron a visitar diversos políticos de la época.

Hace ya casi medio siglo de aquello, que vuelve de nuevo a la actualidad. La última vez que se habló sobre la vinculación o no del padre de Iglesias con el FRAP, Raúl Marco, uno de sus fundadores, escribió: “Lo primero es que yo, ex vicepresidente del FRAP, único miembro de su dirección en activo, no puedo decir si el padre de Pablo Iglesias fue o no miembro del FRAP, por la sencilla razón de que por dicha organización pasaron miles de personas desde la creación de los Comités pro Frap hasta su configuración definitiva. De cualquier forma, dadas las circunstancias, es la persona en cuestión quien deberá decidir lo que dice (o no lo dice) si fue miembro del FRAP”. Su artículo está en la página web del PCE (marxista-leninista), del que surgió el FRAP fruto de una escisión.