Draghi apuesta por una nueva era de multilateralismo en el G-20

  • Las primeras conclusiones sobre el clima parecen insuficientes de cara al próximo encuentro en Glasgow

La primera imagen del día, además de la ciudad blindada y las primeras manifestaciones de los activistas del clima, ha sido la de todos los líderes asistentes a la cumbre G20 con los trabajadores esenciales de la pandemia. Comenzaba así oficialmente la cumbre de los países que representan el 80% del PIB mundial con un homenaje a aquellos que han luchado en primera línea desde hace más de un año y medio contra el COVID. En su discurso a mediodía el anfitrión de la cumbre internacional, el primer ministro italianio Mario Draghi, ha resaltado cuáles son los objetivos después de una “pandemia que nos ha tenido separados”.

Ha enfatizado el diálogo multilateral entre los países y la necesidad de acortar las diferencias “inaceptables moralmente” sobre la vacunación entre países pobres y ricos. Anunciaba también que un nuevo modelo económico estaba naciendo después del COVID-19 gracias al avance de las vacunas y a las “acciones coordinadas de los bancos centrales”.

Las potencias mundiales asistentes al G20 han acordado el impuesto mínimo global de sociedades del 15%. Una medida en la que se trabajaba desde hace años y que pretende, en la práctica, que las grandes multinacionales tributen en el lugar donde tienen el negocio y no en el país en el que les resulte más barato. Se ha reafirmado, lo ha hecho Draghi en su discurso de esta mañana, el compromiso de un 40% de la población mundial vacunada este año y un 70% en 2022 para “conseguir verdaderamente el objetivo de una verdadera e igualitaria recuperación” intentando disminuir las distancias entre los países ricos y pobres.

El líder chino Xi Jinping ha remarcado en su intervención telemática “la estigmatización del virus y la politización en la busca de sus orígenes que van en contra del espíritu solidario de la pandemia”. Por su parte, también por vía telemática, el líder ruso Vladimir Putin ha pedido que la OMS acelere la verificación de todo tipo de vacunas. Ahora mismo la vacuna rusa por excelencia, Sputnik, no es válida en Italia.

Medidas climáticas "insuficientes"

Más intenso y complicado el debate de los líderes mundiales sobre las necesarias medidas climáticas que deben salir de los encuentros de este fin de semana. El borrador que se ha conocido asume un 1,5º la subida de temperatura global, como se había establecido en el Acuerdos de París, pero no se especifican grandes líneas maestras ni se hace referencia al límite temporal de 2050. Se elimina también el concepto de “acciones inmediatas” para reducir la huella climática y evitar el calentamiento del planeta.

Se incluye, en cambio, “para mantener el objetivo serán necesarias medidas significativas de parte de todos los países”. Esta imprecisión en las conclusiones apunta a una dificultad de entendimiento entre las potencias occidentales y las asiáticas, que implica una concesión a China que, presente en el G20 solo vía telemática, había atrasado las emisiones cero a 2060 y también a la India que sostienen que sus economías “pagarían un precio muy alto por una reducción de los combustibles fósiles”.

La visita de Boris Johnson durante la mañana al Colosseo que materializaba las comunicaciones que se han dado durante todo este año entre Italia, liderando el G20, y Reino Unido, liderando G7 y la COP26 que comienza el lunes en Glasgow. Las conclusiones de una serán fundamentales para la otra. El líder inglés ha felicitado al premier italiano por el trabajo realizado durante todo este año y por la “gestión brillante” en el desarrollo de la cumbre.

Inmigración, Afganistán e Irán

Al margen de la agenda oficial del día de hoy, Mario Draghi se ha encontrado también con el líder turco Erdogan, que se ha centrado en los grandes retos globales, en la relación entre la Unión Europea y Turquía, la crisis afgana y la estabilidad del Mediterráneo. Encuentro destacado también el del líder turco con la líder de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, tras el cual se ha establecido “un clima positivo”.

La atención estaba puesta hoy también en el encuentro, al margen de la agenda oficial del G20, de los líderes de Alemania, Reino Unido, Francia y EE.UU sobre la problemática del programa nuclear iraní. En un comunicado conjunto han establecido su “determinación para garantizar que Irán no pueda nunca desarrollar o adquirir un arma nuclear”.

Esto tras reconocer, en ese mismo comunicado, que Teherán ha acelerado el ritmo de iniciativas nucleares provocadoras con las grandes producciones de uranio enriquecido. Imagen polémica de la jornada también relacionada con la presencia del líder brasileño Jair Bolsonaro, que ha llegado a Roma para asistir a las reuniones del G-20 y que hoy se ha paseado por la capital italiana. En los próximos días, será obsequiado con la ciudadanía de honor de un pueblo italiano por los vínculos del lugar con el bisabuelo del dirigente brasileño.

Durante todo el día se han sucedido diversas protestas y manifestaciones en toda Roma con slogans como “Stop patentes, la vacuna es un derecho global”. Mientras los y las líderes mundiales participan en las reuniones en La Nuvola, el edificio destinado al G20 en el barrio del EUR de Roma, los maridos y mujeres respectivos se han movido por Roma en diversas visitas turísticas. La jornada se cierra con una cena, 120 invitados distribuidos en dos salas y en dos enormes mesas, acogidos por el presidente de la República italiana Sergio Mattarella en el palacio del Quirinal para celebrar el final de la primera jornada del G20.

Se espera que este domingo Biden y su mujer asistan a misa en el Vaticano.