Las mujeres que precedieron a Harris como aspirantes a la vicepresidencia de EEUU

  • Geraldine Ferraro concurrió como número dos del demócrata Walter Mondale, exvicepresidente en la era de Jimmy Carter, en 1984

  • Sarah Palin, exgobernadora de Alaska, fue la primera mujer republicana elegida como aspirante a la vicepresidencia de EEUU en 2008

  • Kamala Harris es la tercera mujer en la historia nominada a la vicepresidencia de un partido importante de la nación

Desde que el aspirante demócrata a la Casa Blanca, Joe Biden, eligió esta semana a Kamala Harris, una mujer negra e hija de inmigrantes procedentes de la India y Jamaica, como futura vicepresidenta de los Estados Unidos - en el caso de que ganaran las elecciones presidenciales del próximo 3 de noviembre-, otros dos nombres importantes resuenan hoy especialmente en la historia de la política estadounidense: Geraldine Ferraro y Sarah Palin.

Se distinguen y recuerdan porque hasta ahora habían sido las dos únicas mujeres nominadas a la vicepresidencia de un partido importante de la nación. Cuando en los próximos días Kamala Harris sea nombrada formalmente en la Convención Nacional Demócrata compañera de candidatura de Biden, se convertirá de manera oficial en la tercera mujer que ostente un puesto de las mismas características y en la misma “liga” de partidos relevantes.

Geraldine Ferraro, además de mujer, tenía también la condición de ser la primera italoamericana que se convertía durante la candidatura a la presidencia del Partido Demócrata de 1984, en la número dos de Walter Mondale, ex vicepresidente en la era de Jimmy Carter.

Su campaña presidencial contra el popular presidente en funciones, Ronald Reagan, demostró que Ferraro podía sentirse cómoda en un mundo político especialmente dominado por hombres. Por aquel entonces, sólo 24 de los 535 miembros votantes del Congreso eran mujeres y ningún gobernador era mujer. Se ganó la reputación de decir lo que pensaba sobre los problemas del día a día, lo que en ocasiones generó cierta polémica.

Ferraro creció en Nueva York, trabajó como profesora en la escuela pública y posteriormente como abogada, carrera que sacó adelante estudiando por las noches. En la década de 1970, se unió a la Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Queens (Nueva York), y luego dirigió una nueva oficina de víctimas especiales que se ocupaba de delitos sexuales, abuso infantil y violencia doméstica.

En 1978, Ferraro fue elegida miembro de la Cámara de Representantes de Estados Unidos. Mientras estuvo en el Congreso, se centró en la legislación que luchaba por la igualdad económica de las mujeres.

La nominación de una mujer a la vicepresidencia

The Times publicó un 3 de junio de 1984 un artículo bajo el histórico titular “Y para Vicepresidente… ¿por qué una mujer?”. El periódico ponía entonces en perspectiva la posibilidad de que una mujer demócrata se pudiera posicionar en el contexto de lo elegible en la política estadounidense.

Los periódicos y revistas de aquellos tiempos contaron la historia de su vida: cómo le habían puesto el nombre de su hermano mayor, Gerard, que había fallecido cuando era un niño; la muerte de su padre cuando ella tan sólo tenía solo 8 años; la vuelta de su madre al trabajo como costurera para mantener a la familia; su educación en la escuela católica, y cómo los crímenes particularmente reprobables que había visto como fiscal la impulsaron a ocupar un cargo público…

La revista Ms. Magazine, dijo de ella en su número de julio de 1984: “Es el tipo de política pragmática que la población votante —y los hombres de las trastiendas— podrían encontrar más apetecibles: atractiva, pero no hermosa en los concursos de belleza… Una mujer de carrera moderna, pero impregnada de los valores del Viejo Mundo. Carismática. Enérgica, pero no autoritaria. La mejor preparada de un equipo bien preparado. Fiel al partido. Ella es, en esencia, una especie de candidata de cuento de hadas".

El nombramiento de Ferraro como candidata a la vicepresidencia dio una vuelta importante al desarrollo de la contienda electoral, a la que se sumó la emoción de un público femenino decepcionado por el vencimiento del plazo para ratificar la Enmienda de Igualdad de los Derechos en 1982.

Tres meses antes de ser nominada por Mondale, en una reunión a puerta cerrada en el Caucus Nacional de Mujeres, con la sinceridad que le caracterizaba, llegó a decir: “Cualquier candidato presidencial va a elegir a una mujer como compañera de fórmula a menos que esté 15 puntos por detrás en las encuestas " e incluso posteriormente escribió: "Soy la primera en admitir que, si no fuera una mujer, no habría sido la candidata a la vicepresidencia".

La estrategia de campaña no culminó con el éxito deseado y finalmente Ronnald Reagan y su vicepresidente, George HW Bush, ganaron las elecciones a Walter Mondale y a su vicepresidenta Geraldine Ferraro de manera aplastante.

Durante la campaña Ferraro además se enfrentó a ciertas preguntas incómodas y perjudiciales acerca de la supuesta mala conducta financiera de su marido, el agente inmobiliario y empresario John Zaccaro, quien se mostró reticente a publicar sus declaraciones de impuestos. También su falta de experiencia en política exterior, la hizo vulnerable a los ataques de la oposición y la prensa, especialmente en medio de la Guerra Fría.

La candidatura de Ferraro, no convenció al electorado para que una mujer desempeñara un cargo nacional de tal magnitud y tuvieron que pasar 24 años hasta que se volviera a dar una oportunidad parecida, cuando el senador John McCain eligió a la joven gobernadora de Alaska, Sarah Palin, como su compañera de fórmula en 2008, convirtiéndola en una de las políticas más famosas del país.

Sara Palin: primera mujer republicana candidata a la vicepresidencia

Palin, de ascendencia inglesa, irlandesa y alemana, estudió periodismo en la Universidad de Idaho, su estado natal, y ganó varios concursos de belleza, como el de Miss Alaska, en 1984. Trabajó como periodista deportiva en medios locales de Alaska antes comenzar a adentrarse en la política en 1992, primero como concejal de la localidad de Wasilla (de unos 5.000 habitantes) y después como alcaldesa durante dos mandatos. Con énfasis en la ética y la apertura en el gobierno, la administración de Palin se centró en la educación, la seguridad pública y el transporte. En 2003 fue nombrada presidenta de la Comisión de Conservación de Petróleo y Gas de Alaska.

Cuando el difunto senador John McCain, republicano por Arizona, la eligió como su compañera de fórmula durante su carrera presidencial contra Barack Obama en 2008, a sus 44 años se convirtió en la primera mujer republicana aspirante a la vicepresidencia de los Estados Unidos, y la segunda mujer candidata al puesto, en un partido político importante en la historia de la nación.

En la Convención Nacional Republicana celebrada en septiembre de aquel año, Palin se autodenominó como una hockey mom del montón, y bromeó diciendo que "la única diferencia entre una `madre de hockey´ y un pitbull, es el lápiz labial”, destacando su papel de madre entregada, de las que llevan a sus hijos a los partidos.

Como protestante conservadora, también se desempeñó como defensora de las políticas pro-vida; expresó su desaprobación de la investigación con células madre embrionarias; impulsó la creencia de que el creacionismo (la idea de que la vida fue creada por una deidad), considerando que debería enseñarse en las escuelas públicas junto con el plan de estudios de evolución. Palin también apoyó la decisión de Alaska de enmendar su constitución para prohibir el matrimonio entre personas del mismo sexo.

Las mujeres conservadoras no suelen identificarse como feministas, movimiento que muchas veces han rechazado, pero las defensoras de la gobernadora afirmaban entonces que ella encarnaba un nuevo y mejor feminismo, el de mujeres fuertes y capaces de todo, independientemente de sus creencias. Palin se ha mostrado siempre contraria al aborto incluso en el caso de violación e incesto, formando parte de una asociación llamada "Feminists for Life" ("Feministas por la Vida"). También fue un miembro de la influyente Asociación Nacional del Rifle (NRA por sus siglas en inglés).

Cometió algunos desaciertos en entrevistas y debates públicos que alimentaron las críticas respecto a sus conocimientos a la política exterior y gubernamentales, y que fueron motivo de burla en los guiones de algunas parodias televisivas.

Tras la pérdida de las elecciones de McCain y Palin, frente a Obama y Joe Biden como compañero de fórmula, la pionera nominada vicepresidenta republicana anunció en 2009 que dimitiría como gobernadora de Alaska. Fue la ponente principal en la primera convención nacional del Tea Party en Nashville (Tennessee), en 2010. Palin estuvo abierta a una candidatura a la Casa Blanca en 2012, pero a finales de 2011 anunció que no se postularía.

Los consejos de Palin a Harris

Con sus errores y aciertos, tanto Geraldine Ferraro como Sarah Palin allanaron el camino a otras mujeres que han hecho carrera en el mundo de la política donde predomina el sexo opuesto. Un mundo en el que Kamala Harris es ahora una de las principales protagonistas, tal y como ellas lo fueron en su momento.

Geraldine falleció víctima de un cáncer en 2011. Sarah Palin, quien trabaja como comentarista política en el canal de televisión Fox News, no ha querido dejar pasar la oportunidad para desear a la nueva candidata demócrata, su apoyo como mujer. Tras felicitarla por su próxima e inminente nominación presidencial en la Convención Nacional, le ha recomendado que “fuera de campaña”, no confiara “en nadie nuevo”, que “no se olvide de las mujeres” que estuvieron antes que ella, y que luche con fuerza para mantener a su equipo: “ellos te conocen, conocen tu voz y, lo más importante, son dignos de confianza ...”.

Aunque el final de la carrera política de Palin no fue brillante, esta se reafirma en que “lo volvería a hacer “en un santiamén”: "Fue la experiencia más asombrosa, llegar a ver Estados Unidos, conocer a los estadounidenses, quiénes son, hace que este país sea tan grandioso", señaló.