Coches de segunda mano

Las claves de la DGT para identificar el truco del 'cuentakilómetros' a la hora de comprar un coche

Odómetro, el nombre técnico del cuentakilómetros
Odómetro, el nombre técnico del cuentakilómetrosPixabay
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Comprar un coche de segunda mano puede ser una excelente manera de ahorrar dinero, pero también de perderlo si lo comprado no se ajusta a las expectativas o promesas de los vendedores. A la hora de comprar un vehículo de segunda mano, uno de los factores que pueden influir en el precio del mismo son los kilómetros que se hayan recorrido previamente en ese vehículo, en ocasiones un dato más importante si cabe que los años de edad que tenga. Es por ello que hay que estar muy atentos a que no nos den gato por liebre y el cuentakilómetros esté trucado.

Solicita un informe completo a la DGT

La Dirección General de Tráfico tiene a disposición de la población una serie de informes sobre vehículos que puedes solicitar: reducido, completo, datos técnicos, cargas, vehículos a mi nombre y vehículos sin matricular. A excepción de 'vehículos a mi nombre', el resto están disponibles para cualquier persona, sea o no el titular del vehículo. El informe reducido es gratuito, pero únicamente encontraremos información básica sobre si hay alguna incidencia que impide hacer la transferencia o la fecha de la primera matriculación, que nos indicaría la edad, pero no el kilometraje real.

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Lo mejor es solicitar el informe completo, pues no es demasiado caro (8,67 euros de tasas) y nos puede evitar perder mucho dinero si creemos estar comprando un coche mucho menos usado de lo que haya estado realmente. Simplemente tendrías que introducir la matrícula del vehículo y en motivo de la consulta 'posible adquisición del vehículo'. Según la descripción oficial de la DGT, este informe completo te dará acceso a todo tipo de datos de interés para poder comprar dicho vehículo con garantías.

“Incluye toda la información administrativa, identificación del titular, municipio donde está domiciliado el vehículo, historial de ITV, kilometraje, número de titulares, cargas… así como datos técnicos, puntuación EuroNCAP, llamadas a revisión pendientes y mantenimiento respecto al vehículo solicitado”. Con este informe tendríamos una buena perspectiva sobre el uso que se le ha dado al vehículo que pretendemos adquirir y si este ha sido debidamente cuidado y mantenido.

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Consejos a la hora de comprar un vehículo de segunda mano

Más allá de que en el informe completo vayamos a encontrar la información real sobre el kilometraje que se ha ido registrando a la hora de pasar la Inspección Técnica de Vehículos, todavía podría darse el caso de que ya estuviera trucado el cuentakilómetros cuando eso sucedió (aunque es un riesgo enorme ya que se considera una estafa y puede ser sancionado hasta con pena de cárcel porque se considera que se está intentando artificialmente aumentar el valor del vehículo), la Dirección General de Tráfico tiene otra serie de recomendaciones para evitar caer en el 'truco del cuentakilómetros'.

Para que no nos la den con queso y compremos un coche con más kilómetros de los que parece tener, debemos estar atentos a una serie de señales que nos hagan sospechar de que se ha manipulado el odómetro (el nombre técnico del contador de kilómetros). La primera señal de que algo no cuadra podemos comprobarla en la documentación del vehículo. Según la DGT, deberíamos echar un vistazo a los informes de ITV, donde no solamente se refleja, sino que se ve si hay una “correlación lógica entre el tiempo transcurrido y los kilómetros realizados”.

También conviene revisar algunos elementos mecánicos del vehículo como el motor. El caso que nos haría desconfiar es que lo encontremos o muy limpio o muy sucio. En el primer caso haría sospechar que el coche tiene un kilometraje muy superior al indicado (como por ejemplo observar restos de óxido en algunas piezas) y lo contrario podría ser un indicio de que se pretende ocultar algún defecto presente o pasado. El interior del coche también nos puede aportar pistas de manipulación del cuentakilómetros. Tal y como recogen en las recomendaciones de la DGT, un coche con un kilometraje teórico de 20.000 o 30.000 kilómetros no podría tener todavía signos de uso como “asientos desgastados, ni los pedales sin dibujo o el volante descascarillado”. Si nos encontramos algunos de esos defectos solamente podría indicarnos o que ha sido trucado el odómetro o que se ha realizado un uso muy poco cuidadoso del vehículo si de verdad es tan nuevo. El mejor detector de vehículos con kilómetros trucados es la observación de las piezas que se pisan o tocan frecuentemente al conducir. Por ejemplo, “pedales, la palanca de intermitentes, los mandos de las luces o el pomo de la palanca de cambios, sobre todo si se trata de una caja manual”.

La Policía Nacional también es consciente de estas estafas camufladas de picaresca y tiene una serie de recomendaciones que conviene tener en cuenta, así como para evitar otros comportamientos delictivos por parte de los vendedores:

  • Desconfiar de unos precios demasiado bajos. Evidentemente, nadie nos va a vender un vehículo perdiendo dinero y, como dice el refrán, 'lo barato sale caro'. Desconfía si el precio no se ajusta al valor de mercado para vehículos de la misma marca y modelo con edad y kilómetros similares.
  • No adelantar dinero. Se recomienda nunca realizar una señal, incluso aunque parezca una pequeña cantidad con respecto al valor del vehículo, como 200 o 300 euros. Hay que tener en cuenta que, si nos piden ese dinero y luego desaparecen sin dejar rastro con dicha cantidad a modo de señal, para que pueda ser considerado como un delito leve, el valor de los bienes sustraídos debe ser inferior a 400 euros, por lo que se cubren las espaldas con esas cantidades.
  • Verificar la identidad del vendedor. La recomendación es no fiarnos de recibir un supuesto DNI de la persona a la que vamos a comprar el vehículo, porque podría ser falso, ni tampoco enviar por Internet datos personales nuestros como documentación. Si la transacción es real, mejor dejar este papeleo en manos de una gestoría que realice como se debe el contrato de compra-venta.