Por qué no deberías lavar el coche en la calle: la multa que muchos desconocen
Aunque pueda parecer la opción más práctica, económica y con mejores resultados (y probablemente lo sea), lavar el coche en la vía pública puede acabar en costosas multas.
Lavar el coche es altamente contaminante: la alternativa para tenerlo limpio sin afectar al medio ambiente
Con tanta legislación en materia de vehículos y circulación, es de lo más normal que no seamos conscientes de todos los motivos por los que pueden sancionarnos las autoridades. Algunos conductores desconocen que realizar en la calle ciertas tareas de mantenimiento del vehículo, como pequeñas reparaciones en la vía pública o lavar el coche puede acabar en una multa que puede llegar a ser muy cuantiosa.
Lavar el coche sí, pero en la calle no
Lavar nuestro vehículo no solamente es una forma de tener un aspecto más cuidado y estético, sino que puede estar relacionado directamente con la seguridad vial, si la suciedad impide ver correctamente la carretera, o con un mantenimiento que puede impedir el deterioro de ciertas piezas si se acumula la suciedad.
Si echamos un vistazo al artículo 4.2 del Reglamento General de Circulación, nos dice lo siguiente: “Se prohíbe arrojar, depositar o abandonar sobre la vía objetos o materias que puedan entorpecer la libre circulación, parada o estacionamiento, hacerlos peligrosos o deteriorar aquélla o sus instalaciones, o producir en ella o en sus inmediaciones efectos que modifiquen las condiciones apropiadas para circular, parar o estacionar”.
Por tanto, una de las principales normativas en materia de vehículos deja claro que no podemos verter a la vía pública ciertas materias, entre la que entrarían los restos de productos de limpieza o simplemente el agua sucia mezcla del polvo con esos productos. Ese es el principal motivo por el que se prohíbe lavar un coche en la calle, pero también debido a causas medioambientales. Cada ayuntamiento tiene su propia normativa de residuos, entre la que entrarían también los restos de agentes químicos utilizados para lavar lunas, carrocería, llantas, etc. La cuantía de la multa depende del ayuntamiento en cuestión.
La única alternativa viable, aunque puede que no sea lo más recomendable para evitar confusiones, sería el lavado en seco. Como esta técnica no deja residuos que acaben en la vía pública, estaría exento de la serie de condiciones que refleja el RGC y las normativas de residuos de los diferentes consistorios. En este tipo de adecentamiento no se emplean jabones ni agua, sino que es un producto químico el que se extiende por la carrocería y, una vez que ha actuado, se retira con un trapo de microfibra o similar, teóricamente sin que ningún resto del producto caiga en la vía.
Multas de hasta 3.000 euros
Como decíamos, no hay una cantidad única en toda España, porque no es la DGT la que pone directamente esta multa, sino los ayuntamientos haciendo uso de sus competencias en materias de dejar residuos en la vía pública. Las multas por lavar el coche en la calle tienen un abanico muy amplio, pudiendo ser simbólicas de unos 30 euros o completamente ejemplarizantes, llegando a 3.000 euros en los casos más extremos, que se suelen aplicar más bien con residuos como el lubricante usado al realizar un cambio de aceite.
Tomando como ejemplo el Ayuntamiento de Madrid, para que nos hagamos una idea sobre cómo está redactada y sancionada esta infracción, el artículo 9.d de la Ordenanza de Limpieza de los Espacios Públicos, Gestión de Residuos y Economía Circular dice que está prohibido “ensuciar el espacio público como consecuencia del estado, mantenimiento o limpieza de cualquier tipo de vehículo o maquinaria”.
Además de estos condicionantes, hay que tener en cuenta también que uno de los factores sancionables puede ser el excesivo uso de agua. Según datos de la Fundación Ecología y Desarrollo, “se estima que la cantidad de agua que se utiliza para lavar un coche en el caso de un lavado manual asciende hasta los 80 y 100 litros por vehículo, mientras que en los túneles de lavado esta cantidad aumenta significativamente, llegando a utilizarse entre 250 y 300 litros por cada coche”. Especialmente en periodos de sequía coincidentes con el verano, que es cuando más puede apetecer lavar el coche en el exterior, podemos sumar otra multa por el gasto de agua si hay restricciones impuestas.
Por ejemplo, el pasado 2024, según las restricciones al consumo de agua que impuso la Agència Catalana de l’Aigua, las multas por lavar un coche en la calle serían consideradas de tipo leve, pudiendo llegar hasta los 750 euros de sanción solamente por el agua utilizada en periodo de sequía, a lo que habría que sumar la multa que nos pondrían en sí por lavar el coche en la calle.
Si quieres evitar arriesgarte a una multa, lo más seguro es utilizar un centro de lavado de coches autorizado, que suelen estar presentes en la mayoría de gasolineras, bien sea en cabinas para hacer lavado a mano o en los túneles de lavado. Estos servicios están diseñados para manejar las aguas residuales para su eliminación de forma correcta y garantizan el cumplimiento de la normativa ambiental.