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La sequía ha ido agravándose años tras años ante la alerta de los expertos y la inacción de los políticos. Este año con las altas temperaturas provocadas por la ola de calor y la falta de lluvias han abocado a Galicia y Cataluña a imponer restricciones en el uso del agua.
Desde que comenzó el mes de mayo, el clima en España y en otros países de Europa, como Francia e Inglaterra las condiciones climatológicas presentan una situación bastante anómala en relación con otros años.
La falta de precipitaciones y las previsiones para lo que falta del año no prevén una mejora de la situación hidrológica en España, donde ya hay comunidades que están en alerta y han activado las restricciones sobre el uso de agua.
En Galicia: Pontevedra, Marín, Sanxenxo, Bueu, Poio y Ponte Caldelas-- ya sufren las medidas restrictivas sobre el uso del agua para evitar otras más drásticas que podrían llegar a provocar cortes del servicio, como han advertido las autoridades.
Por el momento, los residentes en eos municipios gallegos no podrán usar el agua para llenar piscinas, ni para el riego de jardines y otros usos lúdicos; así como suprimir baldeos, lavapiés, duchas en las playas y el lavado de vehículos por los particulares.
Galicia atraviesa uno de sus veranos más secos, con precipitaciones un 33% inferiores a las registradas el año pasado.
En Cataluña, la situación afecta a 150 localidades, que permanecen en alerta hidrológica: en la cabecera del Ter, Llobregat medio y Anoia Graià a causa de la sequía, que se está acumulando en los últimos meses, a causa de que las precipitaciones siguen por debajo de lo normal para la temporada estival.
Las comunidades de Aragón, Valencia, Murcia, Extremadura, Castilla-La Mancha y Andalucía han comenzado a restringir el uso hidrográfico. Por el momento, en piscinas y jardines para reducir el consumo de agua sin que la situación indique que vaya a mejor hasta finales del otoño.
En otros países de Europa, que están sufriendo por la falta de precipitaciones, como Reino Unido, Francia, Alemania y Grecia también están comenzando a aplicar medidas restrictivas para economizar el consumo de agua.